XXXV Congreso de la semFYC - Gijón
del 11 al 13 de junio 2015
Caso multidisciplinar. Mayoritariamente en Atención Primaria; también en urgencias y atención especializada.
Caso multidisciplinar
El motivo de la primera visita fue un aviso domiciliario por presentar cuadro de agitación en el contexto de una intoxicación medicamentosa. Anteriormente ha consultado en varias ocasiones por presentar episodios similares relacionados con intentos autolíticos.
Enfoque individual
Antecedentes personales: Trastorno límite de personalidad, esquizofrenia.
Anamnesis: mujer de 36 años, casada, que presenta episodio de agitación. Su pareja refiere encontrar un blíster de clotiapina vacío al lado de la paciente, aunque sin precisar la cantidad tomada por la misma.
Exploración: Agitada, disártrica, poco colaboradora. Movimientos tónico-espásticos de extremidades y tronco, pupilas isocóricas y reactivas, fuerza y sensibilidad conservada, pares craneales normales. Fiebre de 40ºC.
Pruebas complementarias: analítica donde destaca creatinquinasa 13211 U/L. Tóxicos en orina detectan cocaína, tetrahidrocannabinol y benzodiacepinas. TAC craneal y electrocardiograma normal
Enfoque familiar
Familia nuclear biparental con parientes próximos. Convive en el domicilio la madre de la paciente con la que presenta una relación marcadamente ambivalente. Es la mayor de dos hermanos con quien presenta relación cordial. Acontecimientos vitales estresantes: Agresión sexual hace 6 años. Nivel socio-economico medio y cultural bajo. Nuestra paciente es ama de casa y su marido es oficial de construcción.
Desarrollo
Como diagnóstico diferencial planteamos ictus de arteria vertebro-basilar; hipertermia maligna secundaria a ingesta de clotiapina con fines autolíticos, neoplasia cerebral y cuadro conversivo. Ante la fiebre y las cifras de creatinquinasa, el juicio clínico fue de hipertermia maligna.
Tratamiento
Tratamiento antidepresivo. Apoyo emocional por parte de Atención Primaria y reglado por Salud Mental.
Evolución
Actualmente la paciente presenta mejoría del cuadro, aunque aún consume tóxicos y presenta crisis de ansiedad que continúan en tratamiento por Salud Mental.
La patología psiquiátrica es cada día más emergente e importante en nuestro entorno debido a las circunstancias que nos rodean. Debemos dedicar el tiempo necesario a este tipo de pacientes para detectar conductas autolíticas y poder evitarlas. Normalmente prestamos mayor atención a la exploración física y por aparatos, pero también es fundamental la exploración de la esfera afectiva, así como comprobar el ámbito psico-social circundante para poder comprender en su totalidad al paciente.