XXXV Congreso de la semFYC - Gijón
del 11 al 13 de junio 2015
Servicio de urgencias.
Caso multidisciplinar.
Disnea progresiva valorada previamente en consulta de Atención Primaria y de neumología y orientándose inicialmente como cuadro de ansiedad.
Enfoque individual
Antecedentes personales: Sin antecedentes de interés ni hábitos tóxicos. Carpintero de obra. Contusión costal hacía 2 años.
Anamnesis: Varón de 41 años que consulta de forma reiterada por disnea de 2 meses de evolución que empeora en el trabajo y que evoluciona hasta hacerse de moderados/pequeños esfuerzos.
Exploración física: PA 130/80mmHg, FC 104latidos por minuto, Saturación de oxígeno 94% (aire ambiente).
Tonos cardiacos rítmicos con soplo sistólico 1/6 en foco tricuspídeo. Disnea de pequeños esfuerzos con auscultación pulmonar sin alteraciones.
Pruebas complementarias: Aporta analítica general normal, electrocardiograma sin alteraciones y angio-TC torácico informado como normal.
Enfoque familiar
Familia nuclear con dos hijos en edad escolar. Buena cohesión familiar.
Desarrollo
Diagnóstico diferencial: ansiedad, asma extrínseca, insuficiencia cardiaca de debut, tromboembolismo pulmonar (TEP).
Se realiza nuevamente un electrocardiograma en que se aprecia ritmo sinusal con patrón S1Q3T3 y nueva analítica incluyendo D-dímero de 242 mcg/L. Se revisan imágenes del angio-TC en que se objetiva TEP.
Tratamiento
El paciente es diagnosticado de TEP, se inicia reposo absoluto y tratamiento anticoagulante y se cursa ingreso hospitalario para estudio etiológico.
Evolución
Durante su ingreso en medicina interna el paciente es diagnosticado de TEP secundario a síndrome antifosfolípido.
Ante cualquier paciente con disnea previamente no conocida y no explicada se debe realizar una anamnesis adecuada, una exploración física completa y las pruebas complementarias necesarias para aclarar su origen. El diagnóstico de ansiedad debe realizarse ante una clínica muy sugestiva una vez descartadas causas orgánicas de potencial gravedad.
A pesar de que el síndrome antifosfolípido es poco frecuente en varones, es una entidad que hay que tener presente dada su relevancia clínica y la importancia de su diagnóstico para el tratamiento y la evolución del paciente.