XXXVI Congreso de la semFYC – A Coruña
del 9 al 11 de junio 2016
Mixto. Atención primaria y servicios de urgencias y hospitalario.
Caso multidisciplinar.
Debilidad y dolor progresivo en extremidades inferiores (EEII).
Enfoque individual
Antecedentes personales: Hipertensión arterial, diabetes mellitus tipo 2, dislipemia (en tratamiento con estatinas), enfermedad renal crónica (ERC) (creatininas entorno 3,5-4mg/dL), neuralgia postherpética (fentanilo y lyrica), hiperplasia benigna de próstata, obesidad.
Anamnesis: Varón de 65 años que refiere empeoramiento del estado general con astenia y pérdida de fuerza en EEII impidiéndole la bipedestación (llega a consulta en silla de ruedas) de 5 días de evolución. Sin otra sintomatología asociada. Hace 3 meses se cambió atorvastatina 20mg por simvastatina de 40mg.
Exploración física: a destacar fuerza 3+/5 proximal en EEII con reflejo rotuliano disminuido. Sin otras focalidades sensitivo-motoras. Cardiovascular y respiratorio sin descompensaciones agudas.
Pruebas complementarias: en analítica urgente del CAP se objetivó empeoramiento de la creatinina y función renal y aumento de CK hasta 30000 UI/L.
Enfoque familiar
Independiente para las actividades básicas de la vida diaria. Vive con su esposa. Dos hijos que les dan buen soporte familiar.
Desarrollo
Diagnóstico diferencial: ante debilidad muscular simétrica bilateral de predominio proximal se debería descartar miopatía (especialmente secundaria a fármacos), polimialgia reumática, enfermedad de Duchenne y miastenia gravis.
Juicio clínico: dado el antecedente reciente de aumento de dosis de estatinas y la presencia de afectación miopática de predominio proximal, se orientó el caso como mionecrosis por estatinas por mecanismo de toxicidad directa.
Tratamiento
Sueroterapia intensiva, retirada de estatinas y rehabilitación (RHB)
Evolución
En el momento se encuentra asintomático, con función renal estabilizada y normalización de transaminasas y CK en analítica. Está pendiente de valoración para añadir ezetrol como tratamiento hipolipemiante.
Como médicos de familia, ante debilidad muscular de reciente aparición en un paciente en tratamiento con estatinas, debemos descartar su toxicidad, siendo el primer paso la retirada de éstas.