XXXVII Congreso de la semFYC – Madrid
del 4 al 6 de mayo 2017
Atención Primaria y Dermatología.
Caso multidisciplinar
Disuria persistente.
Enfoque individual
Mujer de 63 años, sin antecedentes personales reseñables, acude por presentar disuria de 5 meses de evolución que ha tratado con antibioterapia repetidamente pautada por servicio de Urgencias por sospecha de ITU. En dos ocasiones se realiza Urocultivo tras tratamiento resultando negativos. No otra clinica miccional. No dolor abdominal. Afebril. Dada la persistencia de la clínica se realiza exploración de genitales que pone de manifiesto: lesión ulcerada única, de bordes bien delimitados y consistencia dura, algo dolorosa, de 15mm en cara interna de labio mayor izquierdo. No adenopatías inguinales. La paciente desconoce el tiempo de evolución, haciéndose consciente en ese momento.
Enfoque familiar
Familia nuclear en etapa de contracción, fase centrífuga. Casada, sin relaciones de riesgo. Buena relación con pareja e hijo. Red social con alto apoyo. Barrio nivel socio-cultural bajo.
Desarrollo
Se consideró la posibilidad de que se tratase de una ETS: chancro sifilítico o herpes genital, pero la evolución de la clínica durante meses y el hecho de que se tratase de una lesión única iba en contra de estos diagnósticos respectivamente. Por último consideramos que se tratase de una lesión vulvar maligna.
Tratamiento
Se toman muestras para cultivo (incluyendo virus herpes) y serología para cribado de ETS con resultados negativos. Se derivó también a Dermatología para valoración (Mayo 2016).
Evolución
En Dermatología (Junio 2016) deciden tratamiento con Penicilina G Benzatina 2.400.000UI IM por sospecha de chanco sifilítico (vs liquen escleroso) y citan para revisión (Octubre 2016) cuando realizan biopsia que anatomía patología informa: “carcinoma de células escamosas bien diferenciado e infiltrante” (Diciembre 2016). Se deriva preferentemente a Ginecología. Tras estudio de extensión que descarta metástasis a distancia se lleva a cabo Vulvectomía radical+Biopsia ganglio centinela inguinal izquierda.
La clínica de disuria persistente o recurrente en mujeres es un motivo de consulta frecuente en Atención Primaria. Un error común consiste en tratarla con antibioterapia repetidamente a pesar de no existir evidencia de infección del tracto urinario. No debemos olvidar realizar una exploración genital en estos casos para descartar otras patologías dentro del diagnostico diferencial: colonización microbiana vaginal, prolapso uterino, enfermedades de transmisión sexual, lesiones malignas, etc.