XL Congreso Nacional y I Congreso Virtual de la semFYC - Valencia
del 15 de septiembre al 6 de octubre de 2020
Atención Primaria.
Hombre de 23 años, consulta por bulto en la ingle.
Enfoque individual
AP: Obesidad y migrañas.
Anamnesis: Acude a consulta por tumoración inguinal no dolorosa, que se había detectado 3 días antes. No fiebre. No cuadro tóxico ni otros síntomas. Niega relaciones sexuales de riesgo.
Exploración: tumoración inguinal izquierda de 5 cm, no dolorosa a la palpación, que se extiende a la parte interna del muslo. No adenopatías en otros territorios ganglionares. Resto de exploración anodina.
Pruebas:
Ecografía con PAAF: tres imágenes de adenopatías de aspecto reactivo en región inguinal izquierda. Coincidiendo con la tumoración palpable en cara antero-interna de tercio proximal del muslo, se ve imagen redondeada bien delimitada de 5 cm de ecogenicidad mixta sobre la que se realiza PAAF. AP: celularidad linfoide polimorfa de aspecto reactivo.
Analítica: Hemograma normal, serologías CMV, EB, VIH y LUES negativas.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Se orienta como adenopatía inguinal unilateral reactiva y se realiza control evolutivo.
Las adenopatías en región inguinal en personas jóvenes obedecen en un 60% a causas infecciosas o reactivas.
Tratamiento y planes de actuación
Se decide esperar a evolución.
Evolución
El paciente reconsulta a los 2 meses por persistencia de la tumoración.
Se decide realizar resonancia magnética que orienta adenopatías de origen neoformativo – linfoproliferativo vs sarcoma de partes blandas con diseminación adenopática inguinal bilateral.
Se deriva a oncología para estudio, donde se realiza exéresis ganglionar y PEC-TAC con diagnóstico de Linfoma de Hodgkin no clásico de predominio linfocítico estadio IIA. Se inicia radioterapia.
La PAAF es una prueba bastante accesible desde atención primaria por eso se usa frecuentemente para estudio de adenopatías. Si la PAAF no es resolutiva, puede conllevar un retraso diagnóstico en enfermedades graves como el caso que nos ocupa. Hay mucha controversia sobre la rentabilidad de esta prueba y algunas guías recomiendan biopsia excisional como la mejor prueba para el diagnóstico anatomopatológico de las adenopatías