II Congreso de Residentes, Tutores, JMF y UUDD
10 y 11 de mayo 2024
La promoción de la salud es el proceso que permite a los ciudadanos incrementar su control sobre los determinantes de la salud y, en consecuencia, mejorarla.
La prisión es un espacio comunitario donde un colectivo específico de personas comparten espacio, normas, organización, generándose relaciones entre ellos, lo que facilita promover actividades grupales de educación para la salud.
Nuestro servicio recibió la solicitud de promover una alimentación saludable dentro de la prisión e iniciamos una primera experiencia con una actividad grupal.
Dentro de un módulo que agrupa personas con alguna patología psiquiátrica se detecta un patrón de alimentación caracterizado por el uso excesivo del economato del módulo, donde disponen de alimentos ultraprocesados (caracterizados por ser ricos en hidratos de carbono simples, exceso de sal y de grasas saturadas), en detrimento de las comidas ofrecidas por el comedor del módulo. Se detecta también un abuso generalizado de bebidas estimulantes como el café. Esto conlleva un riesgo mayor de sobrepeso y obesidad, así como de otras comorbilidades.
En este contexto, se lleva a cabo en el módulo una actividad en la que se ofrece un taller de alimentación saludable (plato de Harvard, frecuencias de consumo y vending) y un coloquio posterior donde se comparten dudas y se debate sobre el consumo de ultraprocesados y bebidas estimulantes.
La prisión es un espacio poco habitual para intervenciones de promoción de la salud desde el Centro de Salud. Responder a la demanda de mejora del patrón alimentario, con talleres impartidos por profesionales sanitarios externos al centro penitenciario favorece la participación y la atención de los reclusos.
La promoción de la salud en el ámbito carcelario no es una práctica habitual desde los Centros de Salud. La prisión es un espacio facilitador de experiencias de promoción de la salud. Esta experiencia fue la primera de un proyecto comunitario actualmente en marcha.