Atención Primaria

Lesión cutánea

Enfoque individual

Antecedentes personales: Mujer de 32 años. No alergias ni hábitos tóxicos. No antecedentes personales de interés.

Anamnesis: Consulta por aparición de lesión cutánea friable en los últimos días en región subungueal del primer dedo de mano derecha, tras pinchazo con rosal. A la exploración física se objetiva hematoma subungueal en borde externo de uña, sin apreciarse cuerpo extraño. 

Enfoque familiar

Casada, con un hijo, trabaja de florista. Barrio con nivel socio-económico bajo. 

Desarrollo

Se trata inicialmente con mupirocina tópica, se recomienda cortar la uña y valorar la  evolución. A las dos semanas la paciente acude de nuevo por aumento de tamaño de la lesión subungueal, de aspecto granulomatoso e hipervascularizado.  Ante la sospecha de sobreinfección se decide iniciar antibiótico de amplio espectro (Amoxicilina-Clavulánico 875/125 mg).

Dado que la lesión persiste y aumenta de tamaño se recoge muestra para cultivo, sin objetivarse crecimiento de microorganismos. Finalmente, un mes después la paciente acude por persistencia y aumento de tamaño de la lesión, muy friable, que sangra con facilidad  con los microtraumatismos.

Se solicita valoración por parte de Dermatología que confirma que se trata de un granuloma piógeno y se procede a realizar extirpación quirúrgica. 

Diagnóstico diferencial: cuerpo extraño en piel, lesión sobreinfectada tras traumatismo, infección por esporotricosis, granuloma piógeno.

Tratamiento

Antibioterapia tópica, posteriormente antibiótico oral de amplio espectro, exéresis quirúrgica, curas posteriores con Alginato.

Evolució

Tras exéresis quirúrgica, desaparición completa de la lesión, con buena evolución de la cicatriz, sin recidivas locales. 

El granuloma piógeno, también llamado botriomicoma o hemangioma capilar lobulillar, es una  lesión cutánea de aspecto friable que en la mayoría de los casos aparece tras traumatismos en pacientes jóvenes. Suele tener un crecimiento rápido en semanas, ulcerándose y con tendencia al sangrado si no se extirpan.  La importancia de reconocer este tipo de lesiones en la consulta de Atención Primaria es fundamental dado que son lesiones benignas que en ocasiones se puede confundir con otro tipo de lesiones cutáneas  (esporotricosis, úlcera sobreinfectada, etc) que requieren otro tratamiento y manejo.