Comunicaciones: Casos clínicos

Lo que el paciente no cuenta (Póster)

Ámbito del caso

Atención primaria.

Motivos de consulta

Lesiones cutáneas.

Historia clínica

Enfoque individual

Paciente de 43 años sin antecedentes de interés que acude a consulta por aparición de lesiones ampollosas en ambas manos de unos 5 días de evolución, asocia prurito. Refiere aumento de sensibilidad en ambas manos con dolor al mínimo contacto e impotencia funcional. No hay lesiones en otras localizaciones ni episodios previos similares. No refiere otra clínica asociada ni prescripción de fármacos. Afebril en todo momento.

Enfoque familiar y comunitario

No refiere ambiente familiar y laboral epidémico.

Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas

Se exploró al paciente descartando otras lesiones en piel, en mucosa oral o genital. Basándonos en la anamnesis, la clínica y la exploración dentro del diagnóstico diferencial pensamos en urticaria, eritema multiforme, herpes simple, pénfigo, penfigoide, síndrome de Steven Johson o necrólisis epidérmica tóxica (aunque la afectación suele ser más generalizada).

Tratamiento y planes de actuación

Desde primaria se inicia tratamiento con antihistamínicos para paliar el prurito, realizamos seguimiento y remitimos a dermatología preferente para valoración.

Evolución

Reinterrogado refiere episodio de herpes labial las 2 semanas previas a aparecer las lesiones, la morfología de las lesiones ha cambiado, encontrando ahora lesiones eritematosas, circulares y dianiformes de 4 a 15 mm con una ampolla violacea central en palma de las manos y dorso de los dedos, asocian algo de edema. Continúa sin haber afectación en mucosas ni en otra superficie corporal. Dada la morfología de las lesiones y el antecedente previo de virus herpes simple, el cuadro impresiona de un eritema multiforme. Se solicita analítica sanguínea con anticuerpos y factores del complemento, resultando sin alteraciones significativas. Además en Dermatología se realizó biopsia cutánea objetivando dermatitis liquenoide compatible con eritema multiforme. Se inició tratamiento con corticoide vía oral y tópica. La evolución del paciente desde el momento del diagnóstico ha sido tórpida, recidivando en hasta 5 ocasiones el episodio de eritema multiforme, aunque de menor gravedad, desde atención primaria se ha realizado el tratamiento y el seguimiento posterior.

Conclusiones (y aplicabilidad para la Medicina de Familia)

Es muy importante para el diagnóstico de patologías dermatológicas tanto la exploración completa de piel y mucosas, como conocer los antecedentes infecciosos o de consumo de fármacos que muchas veces pueden esta relacionados, como en el caso del Eritema Multiforme.

Comunicaciones y ponencias semFYC: 2024; Comunicaciones: Casos clínicos. ISSN: 2339-9333

Autores

Albero Marcen, Ines
CS Actur Sur. Zaragoza
Gómez Marco, Ana
CS Amparo Poch. Zaragoza
Villanua Bonet, María Teresa
CS de Zuera. Zaragoza