XXXVI Congreso de la semFYC – A Coruña
del 9 al 11 de junio 2016
Mixto: Atención Primaria, servicio de urgencias y atención hospitalaria.
Caso multidisciplinar.
Numerosas consultas por lumbalgia que no mejora.
Enfoque individual
Antecedentes personales: sin interés.
Anamnesis: mujer de 45 años casada que empieza a asistir a consulta con frecuencia por lumbalgia refractaria a tratamiento de más de 3 meses de evolución, afectando a su calidad de vida. Asocia astenia, insomnio y pérdida de peso y el marido refiere que en los últimos días “dice cosas incoherentes”.
Exploración: Anímicamente muy decaída por la persistencia del dolor. Palidez mucocutánea. Dolor difuso en mesogastrio. Lassegue positivo a 45º, Bragard positivo, sin déficit sensitivo. Durante la ultima consulta presenta desorientación temporoespacial y discurso incoherente.
Pruebas complementarias: analítica en urgencias en la que destaca hemoglobina 5,4, VCM 90 , Urea 145, Creatinina: 3,10 Sodio 128, Potasio 2,7 Cloro 90 Calcio 35, PCR48. Radiografía: signos degenerativos. Resonancia magnética; numerosos aplastamientos vertebrales dorsales y lumbares con patrón permeativo sugestivo de mieloma. TC abdominal y cráneo normal.
Aspirado y biopsia de médula ósea: infiltración de células plasmáticas en medula ósea mayor del 40% con plasmocitoma.
Enfoque familiar
Familia nuclear en la etapa I ( nido sin usar). Red social con apoyo familiar y social aceptable.
AVE: no ha logrado tener descendencia.
Desarrollo
El diagnóstico diferencial fue entre dolor de diversas etologías como artrosis, artritis reumatoide, espondiloartritis, osteoporosis, linfoma, mieloma y dolor de origen metastásico. Ante la ultima consulta en la que encontramos a la paciente con cierta obnubilacion y con desorientacion se deriva a la paciente para realizacion de pruebas complementarias urgentes.
Tratamiento
En tratamiento a nivel hospitalario. Apoyo a su entorno para afrontamiento de la enfermedad.
Evolución
Actualmente permanece ingresada en el servicio de Hematologia.
Una anamnesis detallada y la búsqueda de signos de alarma junto al conocimiento de las etiologías más frecuentes según el grupo de edad de nuestros pacientes, nos ayudaran a encaminarnos hacia un diagnóstico adecuado. Además es importante la labor del médico de familia en el apoyo y ayuda al afrontamiento de la enfermedad tanto al paciente como a su entorno.