XLIV Congreso de la semFYC - Barcelona
14-16 de noviembre de 2024
Comprender cómo los profesionales de salud gestionan el proceso diagnóstico, el manejo y la incertidumbre asociada al SII.
Estudio cualitativo exploratorio, basado en entrevistas individuales semi-estructuradas realizadas entre abril y junio de 2024.
Se entrevistó a 20 profesionales sanitarios en activo y de todos los niveles asistenciales implicados en el manejo de SII. Se consideró experiencia, profesión y especialidad como criterios de variación.
El reclutamiento se hizo a través del investigador principal mediante la estrategia de la bola de nieve, basado en un muestreo teórico y razonado.
Los datos se analizaron siguiendo la teoría fundamentada construccionista. El paciente experto, la triangulación por diversos investigadores y el empleo del método de comparación constante (solapado con la realización del trabajo de campo), facilitó establecer la calidad y el punto de saturación de los datos.
Dado el diagnóstico controvertido del SII, puede enmascarar información por deseabilidad social, estereotipos, etc. para contrarrestarlo, se plantaron las entrevistas en modo de embudo, planteando situaciones relacionadas con disfunciones digestivas en general.
El estudio siguió los principios éticos de la Declaración de Helsinki y las regulaciones nacionales e internacionales vigentes en cuanto a protección de datos.
La detección del SII se explica como un proceso de despistaje, cuyo objetivo es comprobar la ausencia de señales de alerta para descartar otros trastornos considerados más graves.
Estas señales se agrupan en categorías que se corresponden con los principales sentidos implicados en su detección: háptica y acústica, aunque incluyen también elementos psicosociales y otros aspectos.
La estrategia de tratamiento se basa en la educación sanitaria y el aprendizaje de la regulación la sintomatología y sus factores precipitantes.
La detección y el manejo del SII se caracteriza por la incertidumbre. Esto plantea dilemas a los profesionales. Implicar a los pacientes, mediante herramientas para objetivar y monitorizar la sintomatología, podría mejorar su manejo.