XXXVIII Congreso de la semFYC – Barcelona
del 10 al 12 de mayo de 2018
Atencion Primaria
Caso multidisciplinar
Disnea
Enfoque individual
Antecedentes personales: NRAMC. ERC por glomerulonefritis focal y segmentaria de probable origen familiar incluido en programa de diálisis peritoneal y trasplantado de cadáver desde 1993 con datos de empeoramiento progresivo de función renal. HDA por ulcus gástrico. Hipertensión arterial. Hipercolesterolemia. Carcinoma papilar de tiroidesintervenido
Anamnesis: Varón de 73 años de edad que acude a Consulta de Atención Primaria refiriendo dolor precordial, disnea progresiva a mínimos esfuerzos así como intolerancia al decúbito. Se solicita electrocardiograma que muestra disminución llamativa del voltaje de los complejos y radiografía de tórax con cardiomegalia global así como infiltrado intersticial perihiliar.
Exploración física: Tensión arterial 90/60mmHg. Saturación basal de O2 96%. Taquipneico en reposo en reposo. Auscultación cardiorespiratoria: rítmico son soplo sistólico aórtico II/VI; murmullo vesicular conservado. Edemas en miembros inferiores perimaleolares con pulsos pedios disminuidos.
Enfoque familiar
Viudo con excelente apoyo familiar. Nivel socio-cultural medio.
Desarrollo
Cardiomeglia radiológica en paciente con enfermedad renal crónica. Sospecha de derrame pericárdico severo secundario a pericarditis urémica.
Pericarditis vírica. Neoplasias primarias o metastásicas. Miocardiopatía dilatada…
Tratamiento
Con el diagnóstico de sospecha de derrame pericárdico severo es derivado el paciente al servicio de urgencias. Se contacta con Cardiología y se realiza ecocardiografía urgente que muestra derrame pericárdico severo con datos de compromiso hemodinámico.
Pericardiocentesis urgente. Sesión de hemodiálisis.
Evolución
Se realiza pericardiocentesis urgente con análisis del líquido percárdico y se completa el estudio con TAC de tórax para descartar proceso neoplásico, adenopatías y datos de constricción pericárdica. Tras valoración por Nefrología, se decide incluir al paciente nuevamente en sesión de hemodiálisis.
El derrame pericárdico es una entidad que puede llevar a un compromiso hemodinámico grave y que inicialmente presenta manifestaciones clínicas poco específicas lo cual nos puede llevar a un retraso en el diagnóstico. En los pacientes que aún no están sometidos a diálisis, la aparición de la pericarditis urémica es una clara indicación de iniciarla. Los hallazgos en las pruebas complementarias iniciales nos pusieron en alerta. La labor del Médico de Atención Primaria en estos casos no se centra sólo en el reconocimiento en la fase aguda-subaguda, sino también en la identificación de signos de cronicidad que hagan sospechar en una constricción pericárdica.