XLIV Congreso de la semFYC - Barcelona
14-16 de noviembre de 2024
Atención Primaria y multidisciplinar.
Epigastralgia y síndrome tóxico.
Enfoque individual
Hombre de 78 años, fumador, con antecedentes de hipertensión arterial, diabetes mellitus 2, dislipemia y enfermedad pulmonar obstructiva crónica.
Consultó en Atención Primaria por epigastralgia intermitente de meses de evolución, sin relación con las ingestas. No vómitos ni pirosis. No alteraciones del hábito deposicional. Pérdida de 9 kilogramos de peso en 2 meses, hiporexia y astenia. No otra clínica acompañante. Valorado en dos ocasiones en urgencias hospitalarias por dicho motivo. Analítica con amilasa y biología hepática normales. Ecografía abdominal reveló esteatosis hepática, sin otros hallazgos. Solicitada fibrogastroscopia ambulatoria, apreciándose micropólipo gástrico. Anatomía patológica compatible con gastritis crónica leve-moderada inactiva. A la exploración física se palpó masa abdominal en epi-mesogastrio dolorosa. Ante masa abdominal y síndrome tóxico, se solicitaron varias pruebas complementarias de manera urgente. Analíticamente destacaba anemia ferropénica. Radiografía de tórax mostró enfisema. Sangre oculta con una muestra positiva. En TC abdominal se objetivó neoplasia de colon transverso, adyacente a ángulo esplénico, que condicionaba leve estenosis de la luz. Se remitió a unidad de diagnóstico rápido (UDR) para completar estudio.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Neoplasia de colon transverso.
Diagnóstico diferencial: adenocarcinoma duodenal, estómago, páncreas e hígado, carcinoma vesicular, tumor del estroma gastrointestinal, linfoma, sarcoma, metástasis, neoplasia de tejidos blandos, hernias de pared abdominal, quistes y lipomas.
Tratamiento y planes de actuación
Desde UDR se realizó colonoscopia que confirmó adenocarcinoma sincrónico de colon transverso y sigma. Hallazgo intraoperatorio de infiltración neoplásica del márgen caudal de la curvatura mayor gástrica. Practicada resección en bloque (hemicolectomía izquierda ampliada, cuña gástrica y apendicectomía). Precisó colocación de sonda nasoyeyunal seguido de gastrostomía endoscópica percutánea (PEG) por estenosis antral posintervención, así como quimioterapia adyuvante.
Evolución
Retirada PEG sin incidencias, presentando correcta tolerancia oral. Actualmente seguimiento por oncología, hasta ahora sin signos de recidiva.
Las masas abdominales poseen un espectro clínico muy variable. En nuestro caso, la exploración física fue clave. En presencia de una masa abdominal con signos de alarma asociados, el médico de familia debe realizar una anamnesis detallada, así como un correcto diagnóstico diferencial. Solo así se podrá llegar al diagnóstico de certeza e instaurar el tratamiento oportuno de manera precoz, mejorando el pronóstico de los pacientes.