• Incluir de forma proactiva en la formación del residente, el análisis de los resultados en salud y los tratamientos prescritos en su población asignada.
• A partir de la revisión del grado de control y los tratamientos antidiabéticos de las personas mayores asignadas, profundizar en los conceptos de sobretratamiento, seguridad y valorar otros aspectos (fragilidad, deterioro cognitivo, riesgo de hipoglucemia, esperanza de vida) en la toma de decisiones terapéuticas.

A partir del DBSform (base de datos que contiene información clínica, analítica y de prescripción, accesible para los clínicos) se seleccionaron los pacientes mayores de 80 años diabéticos atendidos por la Unidad Básica Asistencial (UBA).

Se obtuvo, entre otras variables, el grado de control de la DM2 y el tratamiento farmacológico.

Se valoró la necesidad de deprescripción, analizando caso a caso y se revaloró el tratamiento en las visitas sucesivas.

Posteriormente, se amplió el análisis al resto de UBA del centro.

Los datos fueron obtenidos por los profesionales de cada UBA sin necesidad de revisar las historias clínicas. 

Se solicitó la aprobación del comité ético de la Fundación Jordi Gol i Gurina.

Dos tercios de la población de edad avanzada con diabetes tenían un control metabólico estricto (Porcentaje > 80 años con HbA1 < 7%: 61,64%), lo cual refuerza la idea de plantear la deprescripción.

La implicación de los residentes en la evaluación del abordaje terapéutico de su población asignada y extenderlo al resto del equipo ha permitido mejorar aspectos de seguridad de nuestra población.

• Reforzar conceptos clínicos y de seguridad a partir del análisis de la población asignada en la formación de los residentes.
• Los resultados permiten identificar los pacientes con diabetes y control metabólico excesivo y revisar su tratamiento.
• Extrapolar el análisis al resto de población de edad avanzada con diabetes del centro y compartirla con sus profesionales de referencia.