XXXVII Congreso de la semFYC – Madrid
del 4 al 6 de mayo 2017
Atención primaria.
Caso multidisciplinar.
Variación de frecuencia cardiaca en registros realizados en domicilio.
Enfoque individual
Antecedentes personales
Hipertensión arterial.
Crisis comiciales en seguimiento por neurología.
Aneurisma de aorta ascendente en situación estable.
FA diagnosticada en Mayo de 2016. Ecocardiograma sin cardiopatía estructural relevante.
Anamnesis
Paciente de 71 años al que se le solicita automedición de cifras de tensión arterial y frecuencia cardiaca en su domicilio, objetivándose variación en la frecuencia cardiaca entre 60-120lpm. Asintomático. El paciente es derivado a la consulta de cardiología.
Exploración
TA 120/70 mmHg, FC 110 lpm, Tª 36ºC, SatO2 98 %
Consciente y orientado.
AC: arrítmico sin soplos
AP: MVC
MMII: sin edemas ni signos de TVP.
Pruebas complementarias
ECG centro de salud: taquicardia de QRS estrecho, a 110 lpm.
ECG en consulta de cardiología: ritmo auricular a unos 300 lpm conducido de manera variable pero con rachas regulares de entre 100 y 60 lpm. Podría corresponder a flúter auricular no común. Eje normal. QRS estrecho. Signos de HVI.
Enfoque familiar
Sin antecedentes familiares cardiológicos de interés.
Desarrollo
Juicio clínico
Flutter auricular atípico.
Diagnóstico diferencial
Flutter auricular típico.
Taquicardia sinusal.
Fibrilación auricular.
Tratamiento
Dadas las características del paciente y el mal control de frecuencia con dosis máximas de frenadores, se intentó estrategia de control de ritmo mediante CVE. Debido a infradosificación de sintrom el paciente precisó realización previa de ecocardigorama tranesofágico.
Se realizó CVE con choque bifásico sincronizado a 200 Julios con resultado efectivo, revirtiendo a ritmo sinusal.
Evolución
Tras la CVE se redujo dosis de metoprolol a 50 mg cada 12 h por tendencia a la hipotensión y se suspendió digoxina.
Se mantuvo anticoagulación con sintrom, permaneciendo en ritmo sinusal. Continua controles en atención primaria.
Un circuito de macroreentrada en la aurícula derecha puede no pasar por el istmo cavo-tricuspídeo. A ello denominamos flutter atípico. Hay ciertos factores de riesgo para el desarrollo de un flutter auricular, como la edad, el sexo (siendo 2,5 veces superior en hombres que en mujeres), o la diabetes mellitus. Su incidencia es mayor cuando se asocia a dilatación de la aurícula izquierda, del ventrículo izquierdo o fallo ventricular.
Puede también asociarse a fallo cardíaco o a enfermedad pulmonar crónica.