XLII Congreso de la semFYC - Sevilla
del 30 de junio al 2 de junio de 2022
Enfoque individual
Antecedentes Personales: Fumadora, Espondiloartritis periférica en tratamiento con Infliximab.
Mujer de 59 con diagnóstico de pericarditis aguda, en tratamiento conservador por lo que se decidió alta a domicilio. A los 5 días acude por aparición de dolor centro torácico, que se irradia a brazo izquierdo, aumenta con la respiración, disnea de mínimos esfuerzos y aparición de fiebre de 48 horas de evolución.
Sat 98% FC100
AC: tonos rítmicos, sincrónicos, audibles, roce pericárdico, no soplos. Ingurgitación Yugular, no edemas de miembros inferiores
AR: murmullo vesicular conservado con roncus diseminados
ECG: ritmo sinusal, 96ltxmin, PR estrecho, supradesnivel ST en cara inferolateral, II, III, AVF, V2-V6.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Cardiopatía Isquémica.
Pericarditis.
Miopericarditis.
Neumotórax.
Neumonía.
Tratamiento y planes de actuación
Se mantuvo hemodinámicamente estable, reposo absoluto, se activó transporte sanitario medicalizado y se derivó a Urgencias de Hospital de Zona.
A/S: HLA B27 negativo, Factor Reumatoide negativo, Antipéptido citrulinado negativo, ANA positivo a título medio con patrón homogéneo.
Ecocardio: Derrame pericárdico severo de 15+9mm con 24mm en saco inferior (bajo riesgo para pericardicentesis), Swimming Heart, colapso de aurícula derecha total en inspiración.
Pericardiocentesis y Drenaje Pericárdico: Punción guiada con obtención de líquido seroso
Estudio de Líquido Pericárdico: Células Nucleadas 15113xmm3, Polimorfonucleares 87%. Tinción Gram negativa
Evolución
Probable Lupus-like por infliximabLa afectación cardíaca no es infrecuente en las enfermedades inflamatorias sistémicas, aunque la afectación cardíaca grave no suele ser la primera manifestación. El 60 por ciento de los casos de pericarditis están relacionados con una enfermedad sistémica y no con enfermedades cardíacas específicas.
En raras ocasiones, el derrame pericárdico y/o la pericarditis pueden ser las primeras pistas de una enfermedad inflamatoria sistémica o una manifestación de una enfermedad sistémica conocida, el compromiso pericárdico generalmente refleja la actividad de la enfermedad sistémica y puede tener un significado pronóstico negativo.
Por lo que es importante a nivel de atención primaria realizar el seguimiento y buscar síntomas compatibles con otras enfermedades sistémicas cuando diagnosticamos una pericarditis, sobre todo cuando la evolución es tórpida.