XXXVII Congreso de la semFYC – Madrid
del 4 al 6 de mayo 2017
Urgencias extrahospitalarias y hospitalarias
Caso multidisciplinar.
Un par de vómitos aislados
Enfoque individual
Antecedentes personales: sin intéres.
Anamnesis: Paciente de 8 años que acude a urgencias extrahospitalarias por presentar anoche un vomito alimenticio. Esta mañana ha tenido ocho vómitos más, con dolor abdominal en mesograstio leve, tipo cólico. Nos refiere su familiar que su hermana está padeciendo gastroenteritis. Ésta mañana última deposición de características normales. Afebril. Alguna molestia genitourinaria asociada.
Exploración: A la exploración abdominal destaca dolor a la palpación profunda de ambos flancos e hipogastrio. Resto sin alteraciones.
Pruebas complementarias: Combur test negativo.
Se dió de alta con suero oral para domicilio.
Al día siguiente la paciente vuelve a acudir con vómitos de repetición, misma clínica que tenía previamente y se deriva a urgencias hospitalarias
Analítica de sangre: Leucocitosis 20360, proteina C reactiva 36.
Enfoque familiar
Buen enfoque familiar, sin acontecimientos vitales estresantes
Desarrollo
Juicio clínico: Apendicitis aguda gangrenosa
Diagnóstico diferencial: gastroenteritis, vólvulo intestinal, cólico biliar complicado, cistitis.
Tratamiento
La paciente fue valorada después de iniciar con tolerancia oral con suero por el servicio de Cirugía Pediátrica ya que persistieron los vómitos y el dolor fue haciéndose continuo, con blumberg claramente positivo.
Se intervino de urgencia realizándose apendicectomía reglada más lavado peritoneal.
Evolución
La paciente evolucionó favorablemente, iniciándose dieta líquida al segundo día postoperatorio y blanda al cuarto, con posterior alta con control por su pediatra.
Los médicos de urgencias vemos mucha patología pediatrica y tenemos que estar atentos a la evolución y seguimiento de éstos pacientes. En éste caso el hecho de que su hermana esté cursando una gastroenteritis y que la paciente tenga vómitos no quiere decir que tenga una gastroenteritis aunque exista esa posibilidad. Habría que haber empezado la tolerancia oral en urgencias extrahospitalarias y esperar a la evolución o advertirle a la paciente que si no cedían los vomitos e iniciara con más dolor o fiebre acudiera a urgencias hospitalarias para descartar una apendicitis (sería darle una hoja informativa o explicar los signos de alarma, hecho que se nos olvida en ocasiones). La paciente evolucionó favorablemente pero la apendicitis llego a ser gangrenosa, si se hubiera tardado en intervenir algo más le podría haber producido una sepsis.