XXXV Congreso de la semFYC - Gijón
del 11 al 13 de junio 2015
Mixto, Atención Primaria y Atención Especializada
Caso multidisciplinar
Paciente que acude a consulta y nos muestra un fragmento de mandíbula que se ha desprendido durante un procedimiento dental.
Enfoque individual
Antecedentes personales: Exfumadora desde 1996, hiperreactividad bronquial, hipercolesterolemia, HTA, osteoporosis, fractura vertebral postraumática en 2008, psoriasis, histerectomía.
Anamnesis: mujer de 63 años con larga historia de lumbalgia desde el año 2000 que sufre fractura-aplastamiento L2 en 2008, diagnosticada de osteoporosis por osteodensitometría en 2009 y seguida en consulta específica de osteoporosis hospitalaria, donde se instaura tratamiento con risedronato 75mg semanal durante tres años, posteriormente parathormona durante 18 meses y a continuación, denosumab 60mg, semestral, dos dosis, hasta que, en 2013 consulta por dolor mandibular y nos muestra fragmento óseo arrancado durante un procedimiento dental.
Exploración física: dolor a la palpación mandibular y exposición de hueso necrótico en región mandibular izquierda. Fragmento óseo de aproximadamente 1cm de diámetro.
Pruebas complementarias: ortopantomografía, osteodensitometría, analítica general.
Enfoque familiar
Vive con su esposo y dos hijos. Trabaja en empresa de limpieza.
Desarrollo
Osteonecrosis mandibular en paciente con osteoporosis que ha recibido tratamiento prolongado con bifosfonatos y denosumab.
Tratamiento
Dadas las circunstancias, se retira tratamiento con denosumab y se pautan calcio y vitamina D a dosis superiores a las que venía recibiendo. Analgesia con tramadol-paracetamol. Se ha retirado de su trabajo y realiza menos esfuerzos. Pasea diariamente al aire libre.
Evolución
Mejoría clínica del dolor con el reposo relativo. No ha habido más desprendimientos mandibulares y en osteodensitometría reciente no han empeorado sus parámetros de osteoporosis, a pesar de no recibir tratamiento específico.
La osteonecrosis mandibular es una reacción adversa asociada al uso de bifosfonatos y denosumab. Se recomienda adoptar las medidas preventivas necesarias para evitar la osteonecrosis mandibular como son revisión y mantenimiento de la higiene bucal al inicio y durante el tratamiento y evitar, durante el mismo, procedimientos dentales invasivos en pacientes con factores de riesgo, con patologías odontológicas o que no se hayan recuperado aún de una cirugía maxilofacial previa.