XXXV Congreso de la semFYC - Gijón
del 11 al 13 de junio 2015
Atención Primaria
Caso multidisciplinar
Lesión en la cara que ha crecido en el último mes.
Enfoque individual
Antecedentes personales: Dermatitis seborreica en cara tratada en repetidas ocasiones en los últimos cinco años. Resto de antecedentes sin interés.
Anamnesis: Lesión en la cara de años de evolución que ha crecido en el último mes. No es dolorosa ni pruriginosa.
Exploración: Lesión papulo-nodular en región maxilar Derecha con bordes definidos, simétrica, coloración marrón homogénea, de unos 4mm de diámetro.
Dermatoscopio: lesión bien delimitada, fondo marrón luminoso, con áreas gris azulado y múltiples puntos negros diseminados.
Desarrollo
Se plantea diagnóstico diferencial entre Nevus y Melanoma.
Tratamiento
Se realiza exéresis quirúrgica en la Consulta de Cirugía Menor del Centro de Salud con estudio anatomo-patológico que muestra a nivel dérmico proliferación de células névicas que se disponen mayoritariamente formando nidos y agregados. Se trata de células redondeadas y uniformes que presentan núcleos de contornos regulares y redondeados, sin nucléolos evidentes ni evidencia de actividad mitótica. Esta proliferación celular se extiende en profundidad hasta hipodermis, donde se observa, en relación a las mismas, la presencia de formaciones nodulares de tejido óseo. La anatomía patológica es compatible con osteonevus de Nanta.
Evolución
Buena evolución de la herida quirúrgica.
El osteonevus de Nanta es una lesión rara que se caracteriza por la formación de material osteoide en un nevus intradérmico. Representa el 1,4% de nevus pigmentados. Su localización más frecuente es en cara y cuello y es más frecuente en Mujeres. Se ha observado una frecuencia mayor en pacientes con antecedentes de dermatitis y otras afectaciones crónicas de la piel. El diagnóstico es histopatológico y a pesar de ser una lesión benigna se ha descrito un caso de melanoma maligno sobre un osteonevus de Nanta. Por esta razón algunos autores consideran prudente vigilar al paciente. Consideramos importante comunicar la detección de este caso por su infrecuencia. Actualmente no es del todo conocida la posibilidad de malignización de estas lesiones por lo que consideramos necesario el conocimiento y seguimiento por parte del médico de familia de estas lesiones teniendo en cuenta que será el primer contacto con estos pacientes.