XXXIV Congreso de la semFYC - Gran Canaria
del 12 al 14 de junio 2014
ÁMBITO DEL CASO
Atención Primaria
Caso multidisciplinar
MOTIVOS DE CONSULTA
Sensación de hinchazón del ojo izquierdo.
HISTORIA CLÍNICA
Enfoque individual
Antecedentes personales: Varón de 48 años. Asma extrínseca, dispepsia, ansiedad, cervicalgia, hipercolesterolemia, abuso del tabaco, anemia normocítica, alopecia areata
Tratamiento actual: Atorvastatina 20, Anafranil 75, Orfidal 1, Plusvent 25/250 y Ventolin 100
Anamnesis:
Prominencia del ojo izquierdo desde hacía dos años con pérdida de agudeza visual. Portador de lentes desde hace 8 años. Perdida de 2 kg y algo de astenia en los últimos meses. No cefalea. No taquicardia ni palpitaciones. No diarrea. Análisis de Sangre y Orina normal hace 6 meses salvo hipercolesterolemia. TSH normal.
Exploración:
Exoftalmos/Proptosis del ojo izquierdo
Campimetría por confrontación normal
Disminución de agudeza visual del ojo izquierdo
Pruebas complementarias:
Análisis de sangre con hemograma, bioquímica y coagulación, hormonas tiroideas completamente normal. Hoja de Interconsulta urgente con OFTAMOLOGÍA.
Oftalmología: Exploración oftalmológica normal y proptosis a estudio
TAC: Masa sólida intraconal izquierda estable de 2,7 x 2,9 x 1,7 cm localizada entre el nervio óptico y musculo ocular externo, con áreas de mayor captación de contraste en su porción más caudal, compatible con hemangioma cavernoso, schwanoma, hemangiopericitoma o meningioma.
RM: Diagnostico de certeza: hemangioma cavernoso retroocular
Enfoque familiar
No realizado.
Desarrollo
Diagnóstico diferencial con: Hipertiroidismo (Enfermedad de Graves-Basedow); Aneurisma de la arteria oftálmica; Telangiectasias; Hemangioma; Linfangioma; Tumores; Periostitis sifilítica; Periostitis tuberculosa.
Diagnóstico definitivo: Hemangioma cavernoso retro-ocular
Tratamiento
Cirugía urgente retro-ocular en el servicio de Oftalmología de un hospital especializado.
Evolución
El paciente fue operado con éxito por un oftalmólogo experto en este tipo de tumores. Tras la intervención evolucionó favorablemente y en la actualidad se encuentra asintomático y con recuperación completa de la visión de su ojo izquierdo que aparece colocado correctamente en su órbita.
CONCLUSIONES
Una proptosis ocular, sobre todo unilateral, es un signo que puede revelar una patología potencialmente grave por lo que debemos actuar con celeridad realizando las exploraciones complementarias y las derivaciones oportunas para establecer un buen diagnóstico y ofrecer el mejor tratamiento. El médico de familia es pieza clave en la atención a los pacientes en Atención Primaria por su extensa formación médica y ser ésta la puerta de entrada al sistema.