XXXV Congreso de la semFYC - Gijón
del 11 al 13 de junio 2015
Mixto. Atención primaria y especializada.
Caso multidisciplinar
Mujer de 76 años con linfocitosis y trombocitosis mantenida.
Enfoque individual
Antecedentes personales: DM, HTA, tiroiditis de Hashimoto, dislipemia en tratamiento con metformina 850 mg 1/12 H, candesartan 16 mg 1/24 H, eutirox 75 mg 1/12 H, fenofibrato 250 mg 1/24 H.
Anamnesis: Refiere cuadros catarrales frecuentes e infecciones urinarias de repetición.
Exploración física: No adenopatías, visceromegalias ni edemas.
Pruebas complementarias: Hemoglobina 11.4, leucocitosis 11.790 (Neutrofilos 4.200, Leucocitos 6.220), plaquetas 452.000
Frotis con linfocitosis sin manchas de Gumprecht.
B2microglobulina 3.1, proteinograma, inmunoglobulinas normales.
Inmunofenotipo: Subpoblación de linfocitos T 33.1% del total con un 5.6% con alteración en la expresión de marcadores.
No proliferación linfoide B monoclonal. ANA, coagulación, perfil férrico, ácido fólico y vitamina B12 normales.
TCD, JACK 2, COOD negativos.
Reordenamiento de recepctor de célula T: Patrón monoclonal en cuanto a las cadenas delta y gamma del receptor de células T.
Tac torácico-abdominal: No adenopatías significatias en mediastino ni retroperitoneales, engrosamiento pleural en lóbulo medio, hígado esteatósico sin LOES.
Enfoque familiar
Familia en la etapa final de Huerta, viuda, vive sola, tiene apoyo de una hija.
Desarrollo
Diagnóstico: Sindrome linfoproliferativo T con expresión periférica y trombocitosis YACK 2 negativa.
Distinguimos entre linfocitosis infecciosas, reactivas o proliferativas.
En las proliferativas diferenciamos los linfocitos activos de los blastos típicos de los sindromes linfoproliferativos, mieloproliferativos, o mielodisplásicos.
Las trombocitosis pueden ser primarias, pseudotrombocitosis o secundarias a procesos infecciosos, inflamatorios, neoplásicos, fármacos y ferropenia.
Tratamiento
No precisa tratamiento del sindrome linfoproliferativo por ahora.
Las trombocitosis si no hay clínica no se trata hasta un diagnóstico correcto pues no hay una relación directa entre el número de plaquetas y riesgo de trombocis o sangrado.
Evolución
Continúa seguimiento en consulta externa de hematología por el riesgo de malignización del sindrome linfoproliferativo.
En la fórmula leucocitaria los valores absolutos tiene mayor significación que el porcentaje.
En primaria antes de derivar a hematología debemos repetir la analítica a las dos semanas con el frotis sanguineo si es preciso.
Derivamos las linfocitosis con morfología proliferativa, alteraciones de otras series, blastos, mas de 20.000 leucocitos o exploración fisica alterada.
Las trombocitosis mantenidas no secundarias se derivan aunque el frotis y la exploración física sean normales, para completar el estudio molecular, citogenético o de medula ósea.