XXXI Congreso de Comunicación y Salud - El Escorial
28, 29 y 30 de abril de 2022
Tratamiento paliativo por cáncer de mama metastásico de 20 años de evolución.
Enfoque individual
Mujer de 63 años, diagnosticada de cáncer de mama a los 30 años, recibiendo entonces tratamiento quirúrgico. A los 40 años recidivó con metastasis óseas, pulmonares y hepáticas. Recibiendo desde entonces múltiples líneas de tratamiento quimioterápico, la paciente rechazaba abandonar el tratamiento activo. Ha sido visitada semanalmente por su médica de familia prácticamente durante los últimos 5 años.Enfoque familiar y comunitario
La paciente vive con su marido, con el que tiene una fuerte relación. Siendo él, el cuidador principal. Tiene dos hijas, que viven en la misma ciudad.Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
La enfermedad de nuestra paciente, fue muy larga, consiguió romper todos los pronósticos que le fueron dando a lo largo del tiempo. Afectando la enfermedad en la vida de la paciente y en la de su nucleo familiar. Los últimos meses de vida fueron especialmente duros, la paciente permanecía encamada prácticamente todo el día. Presentaba una importante deformidad esquelética secundaria a las metástasis óseas. Clínicamente tenía el dolor controlado (era portadora de un reservorio subcutáneo que le dosificaba medicación analgésica), estaba correctamente aseada y nutrida.
Tratamiento y planes de actuación
Las visitas domiciliarias que le realizabamos semanalmente inspeccionábamos sobre síntomas físicos y psíquicos. La comunicación era el pilar básico de las entrevistas, y fue la herramienta empleada en cada una de las visitas domiciliarias tanto con la paciente como con la familia. La escucha activa, los silencios, el contacto físico, todo ello ayudó a crear una relación de cercanía y confianza, la paciente nos verbalizaba que esa forma de actuar le transmitía tranquilidad .Evolución
Durante sus últimas semanas de vida le surgían muchas dudas, ella preguntaba y nosotras tratábamos de contestar, muchas veces no eran necesarias las palabras. Nos afirmaba reiteradamente, que la cercanía que le habíamos mostrado le ayudaba a estar tranquila y sin miedo.