Atención Primaria.

Deseo de una muerte digna.

Enfoque individual

Paciente octogenario, con diabetes mellitus tipo 2, hipertensión, hipercolesterolemia y temblor intencional. El año previo comenzó con adelgazamiento, astenia y anorexia. Pese a explicarle la posible existencia de proceso neoplásico rechazó realizar estudios complementarios y derivación a Hospital. Continuó con deterioro general y caquexia, con empeoramiento brusco tras episodio de hematuria franca durante un mes, que lo dejó encamado. Continuó con incontinencia fecal con deposiciones diarreicas diarias, lo que le llevó a una depresión reactiva.

Enfoque familiar y comunitario

Vivía con su pareja, sin otro apoyo familiar al no tener relación con sus hijos ni exmujer. Con dificultades económicas. Gracias a Trabajo Social le prestaron una cama y un colchón antiescaras y varias horas al día acudía personal de ayuda a domicilio.

Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas

El paciente, ante su situación de completa dependencia para las actividades básicas de la vida diaria, comenzó a interesarse por la eutanasia pese a no tener diagnóstico de su patología.

Tratamiento y planes de actuación

Intentaron solicitar la prestación de ayuda para morir, faltándoles la firma del médico, a quien no había consultado. Posteriormente les dijeron que tenian que hacer el testamento vital y les solicitaron de nuevo el primer documento. Tras ello consultaron con su médico, quien tras varias charlas con el paciente para entender su deseo y explicar qué opciones se le podrían ofrecer, se llegó a la conclusión que quería ser sedado, pero cuando llegase el momento de morir.

Evolución

Tras una correcta explicación de los Cuidados Paliativos, el paciente entendió que era este tipo de atención médica la que deseaba y estaba de acuerdo en que su médica le acompañase en ese final.

Ejemplificar con este caso las dificultades que presenta la población rural, mayormente envejecida y sin apoyo familiar directo para gestionar y distinguir documentación y burocracia sanitaria como son las voluntades anticipadas, la eutanasia y los cuidados paliativos. Términos sanitarios tan distintos y similares a la vez, que precisan de una estrecha colaboración entre médico, familia y paciente para una correcta gestión.