XXXV Congreso de la semFYC - Gijón
del 11 al 13 de junio 2015
Mixto: Fundamentalmente Atención Primaria y diversas áreas de Especializada (Endocrinología, Neurocirugía…)
Caso multidisciplinar
Dolores osteoarticulares generalizados y disfagia de larga evolución
Enfoque individual
Antecedentes personales: HTA, DM tipo 2, diversas intervenciones quirúrgicas. No hábitos tóxicos.
Anamnesis: Mujer de 59 años. Historia de dolores osteoarticulares generalizados, labilidad emocional y disfagia de 6 meses de evolución. Consultas previas con diversos especialistas (ORL, traumatología, rehabilitación, logopedia…) sin diagnóstico definitivo.
Exploración (datos llamativos): macroglosia, prognatismo y facies tosca. Agrandamiento de partes acras.
Pruebas complementarias: Sin alteraciones en hemograma y bioquímica básica, Radioinmunoanálisis IGF-1 elevada, Prolactina elevada. RMN cerebral: masa hipofisaria compatible con adenoma hipofisario; Colonoscopia: diverticulosis; Campimetría normal: ECG normal; Ecocardiograma: normal, FE 70%.
Enfoque Familiar
No existen antecedentes familiares similares, buen apoyo social y familiar, cónyuge con patología oncológica activa, hijos adultos sin patologías. Nivel social medio.
Desarrollo
La inspección y la exploración son esenciales para establecer un diagnóstico de sospecha de acromegalia. Las causas pueden ser carcinoma o adenoma hipofisario productor de GH. La RNM confirma la existencia de una masa hipofisaria.
Tratamiento
Se deriva a Atención Especializada (Endocrinología). Tras la confirmación diagnóstica de acromegalia se deriva a neurocirugía para exéresis transesfenoidal. La deprivación hormonal posterior se trata con Hidrocortisona por vía oral.
Evolución
Tras el procedimiento quirúrgico e instauración de tratamiento sustitutivo se realiza seguimiento a nivel de Atención Primaria. Se observa normalización de pruebas complementarias y remisión progresiva de la clínica.
1- El tratamiento precoz de la acromegalia es esencial para su pronóstico. El médico de familia es el principal responsable en la detección y diagnóstico precoz de esta enfermedad. En nuestro caso la paciente fue intervenida tres semanas después del diagnóstico inicial de su médico de familia.
2- La correcta formación de un médico de familia está en relación directa con la eficacia de la gestión de los recursos de un sistema sanitario.