Desarrollar la actividad ecográfica en el centro de Salud en un momento en que las consultas de Atención Primaria están saturadas.

Con la pandemia, nuestras consultas de Atención Primaria se han visto sobrecargadas: menos personal, falta de suplentes, muchas consultas telefónicas, reanudación de las consultas presenciales, consultas cortadas por estar en atendiendo Covid... Los profesionales que hacemos ecografía disponemos de poco tiempo para sacar partido a la técnica. Decidimos organizarnos y empezamos por un día a la semana (ahora ya son dos). Bloqueamos las agendas de las tres compañeras que tenemos formación durante hora y media al principio de la mañana, y hacemos cuatro o cinco ecografías que tenemos programadas por medio de una “agenda de ECOs”, abierta a todos los médicos del centro. Durante cada cita, exponemos previamente el caso, en grupo, y repartimos las tareas: ejecución de la exploración (si están los residentes, la hacen ellos) y elaboración del informe. De ese modo, vamos aprendiendo unos de otros, afianzamos conocimientos, y agilizamos cada consulta.

La ecografía en Atención Primaria es una herramienta muy importante, que nos ayuda a disminuir la incertidumbre diagnóstica y es, además, un beneficio para el paciente. El hecho de hacer ecografías en el Centro de Salud, en grupo, uniendo compañeras más expertas con las que estamos iniciándonos y junto a los residentes, en unos días y horas prefijados, a pacientes citados previamente, nos ha ayudado a afianzar la técnica de la ecografía, ampliar nuestros conocimientos y disfrutar con sus posibilidades.

La creación de agendas específicas de ecografías algún día fijo de la semana en un tramo horario donde el resto de atención presencial esté bloqueada ayuda a la realización y a la expansión del uso de esta técnica.