Lesiones pruriginosas en miembros superiores y en tórax.

Enfoque individual

Antecedentes personales: Hombre de 28 años sin alergias medicamentosas ni antecedentes médico-quirúrgicos de interés.

Anamnesis: El paciente acude a urgencias de Atención Primaria refiriendo la aparición de unas lesiones eritematosas y muy pruriginosas en miembros superiores y en el tórax de 24 horas de evolución. Niega fiebre. No refiere ninguna otra sintomatología.

Exploración física: Se realiza una exploración física completa en la que se observan lesiones ampollosas sobre base eritematosa con lesiones de rascado asociadas. No presenta afectación mucosa. Tras ello, se ahonda en la anamnesis y el paciente refiere que tres días antes de la aparición de las lesiones había estado podando una higuera en su huerta sin camiseta durante un día muy soleado.

Pruebas complementarias: no son necesarias.

Enfoque familiar y comunitario

Sin interés.

Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas

Juicio clínico: Fitofotodermatosis.

Diagnóstico diferencial: Quemaduras solares, reacciones fototóxicas a fármacos, dermatitis por contacto, dermatosis ampollosas, toxicodermias, infección herpética.

Tratamiento y planes de actuación

Se pautó tratamiento con corticoides tópicos y antihistamínicos orales, además de evitar la exposición solar. 

Evolución

El paciente mejoró a los pocos días desapareciendo el prurito tras comenzar el tratamiento y las lesiones tras una semana de tratamiento. 

La fitofotodermatosis es una reacción cutánea fototóxica tras el contacto con algunas plantas o derivados que contengan sustancias fototóxicas seguida de una exposición solar. Es necesario que la planta libere la sustancia y que la piel con la que entre en contacto se encuentre húmeda. Las lesiones se caracterizan por la eritema, vesículas o ampollas muy pruriginosas. El diagnóstico es clínico y el tratamiento consiste en eliminar el posible agente causante, corticoides tópicos, antihistamínicos orales y evitar la exposición solar. Los procesos dermatológicos son un motivo de consulta frecuente en Atención Primaria, por ello, es muy importante que el médico de Atención Primaria sea capaz de diagnosticar y tratar la mayor parte de las lesiones dermatológicas, detectando aquellas graves o que requieran un tratamiento urgente. Es imprescindible realizar una historia clínica detallada con una buena anamnesis para poder llegar a un diagnóstico de sospecha e iniciar el tratamiento adecuado de manera precoz.