- Fomentar las relaciones entre dos grupos de la comunidad en edades extremas de la vida (personas mayores con soledad no deseada y alumnado preescolar).
- Aumentar la sensación de estima y pertenencia comunitaria de los ancianos.
- Sensibilizar del concepto de soledad no deseada y su solución mediante la inclusión a los preescolares.

Se detectaron, en consulta y contactando con servicios sociales, las personas vulnerables que componían el colectivo de ancianos con soledad no deseada del pueblo. 

Se desarrolló material docente relacionado con los valores que se querían transmitir a través del cuento "Por cuatro esquinitas de nada" (Jérôme Ruillier).

Se acudió al colegio y en colaboración con el profesorado de preescolar, se dedicaron aproximadamente 10 minutos en cada clase a exponer el cuento y el problema que compartían algunas personas mayores del pueblo, y durante unos 20 minutos más se impulsó a las niñas y niños a realizar postales navideñas que se destinarían a esas personas mayores con soledad no deseada.

Se recogieron un total de 118 postales.
Durante las siguientes dos semanas, se entregaron en consulta 10 postales, en visita domiciliaria otras 7, y se enviaron por correo postal 12 más.

El alumnado de preescolar se mostró empático y muy participativo, disfrutando de la actividad. 
Los 29 pacientes mayores que recibieron una postal se mostraron muy agradecidos y emocionados, ya que suelen ser fechas muy difíciles para ellos. Abordar el problema permitió incluir a algunos de estos pacientes en actividades comunitarias organizadas por servicios sociales (escuela de mayores, gimnasia, talleres...)

Sensibilizar y abordar la soledad no deseada debe ser prioritario en una sociedad que se precie.
Se requiere implicar a los profesionales educativos, y si es factible a los servicios sociales.

Es una experiencia relativamente sencilla de reproducir tanto en ámbito rural como urbano e incluso, con la correspondiente labor organizativa subyacente, a otros niveles (comarcal, provincial, nacional...).