• Reflexionar y tomar conciencia sobre el impacto de nuestras prescripciones como médicos de familia en el medio ambiente.

• Promover una actitud crítica a la hora de plantear cómo debemos aconsejar a nuestros pacientes en clave de reducción del impacto en nuestro medio.

• Promover una relación médico-paciente-comunidad-entorno sostenible. 

La foto, tomada en consulta, pone de manifiesto la relación entre nuestra práctica clínica —el fonendoscopio— (lo que pensamos, decimos, hacemos, prescribimos, indicamos, aconsejamos y acompañamos desde la consulta) y el medio que nos rodea —la planta—. 

El cambio climático se muestra como la mayor amenaza del siglo XXI y en nuestro propósito diario de mejorar la salud de la población que atendemos la actividad que realizamos el sector de la salud genera enormes emisiones anuales de gases de efecto invernadero. Si el sector de la salud fuera un país, sería el quinto emisor mundial. 

El pequeño gesto de indicar una prueba o prescribir un tratamiento, realizar una exploración o aconsejar sobre los hábitos de las personas, genera un impacto en términos medioambientales que no somos lo suficientemente conscientes. Nosotros, como profesionales, desde nuestras consultas debemos contribuir a este cambio global en la forma de ejercer la atención sanitaria a partir de ahora. 

La evidencia indica que la situación es urgente y hacen falta medidas contundentes y sostenidas en el tiempo. Si el medio ambiente fuera un paciente estaría en situación grave y seguro que dedicaríamos todo nuestro conocimiento, nuestra pericia y nuestro esfuerzo para poder devolverle la salud.

Docencia.

Ética

Práctica clínica.