VIII Jornadas semFYC de Medicina Rural
18 y 19 de octubre de 2024
Enfoque individual
Hombre de 53 años, conductor de autobús, con antecedentes personales de rinitis alérgica y DM2 en tratamiento con metformina que acude a consulta por lesión nodular en espacio tenar de mano izquierda. Niega traumatismo previo. No contacto con acuarios, carnes, ni actividades de jardinería. No viajes.
A la exploración física lesión nodular, eritematosa, de 1 cm de diámetro, que infiltra la piel, no adherida a planos profundos.
A la dermatoscopia se aprecian 2 úlceras centrales que no sangran, la periferia del nódulo es rosada con alguna lesión lineal blanquecina sin vasos ni velo azul.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Ante la sospecha de granuloma a cuerpo extraño vs patología infecciosa (leishmania) se deriva a Dermatología de forma preferente. En Dermatología realizan biopsia cutánea que muestra granulomas, sin positividad de PAS, giemsa ni Ziehl-Neelsen, que podría ser compatible con leishmania.
Tratamiento y planes de actuación
En Dermatología realizan 2 sesiones de crioterapia, y terapia con glucantime (antimonial) intralesional.
Evolución
En un primer momento, dado que el paciente trabaja como conductor se le tuvo que dar la incapacidad temporal por molestias de la lesión al contacto con el volante, pero posteriormente gracias al tratamiento con antimoniales presentó gran mejoría clínica por la marcada reducción de la inflamación y el tamaño de la lesión.
En España, la leishmania es una enfermedad endémica. Me gustaría recordar el brote que se vivió entre 2010-2012 en el Hospital de Fuenlabrada de leishmania cutánea a raíz de la introducción de conejos y liebres en el parque municipal.
Es fundamental saber reconocer la leishmania cutánea, presentándose la mayoría de casos como papulas indoloras sin costra central, porque el no tratamiento puede provocar la deformidad de las estructuras anatómicas.