XXXVII Congreso de la semFYC – Madrid
del 4 al 6 de mayo 2017
Atención primaria
Caso multidisciplinar
Paciente de 83 años de edad que acude a la consulta por episodios de pérdida de memoria, desorientación, torpeza desde hace 15 días
Enfoque individual
Antecedentes personales: Obesidad, Diabetes Mellitus de mal control, Insuficiencia renal, Hipertensión Arterial, Fibrilación auricular, Asma.
Anamnesis: Desde hace varios meses presenta difícil control glucémico, episodios de urgencia hipertensiva y una FA de novo, por lo que se va a vivir al pueblo con su hermano y cuñada hace un mes. Hoy acude con su cuñada a la consulta porque en los últimos quince días se encuentra desorientada en tiempo y espacio, camina despacio por miedo a caer, presenta deterioro cognitivo y bloqueo mental.
Exploración: Cardiorrespiratoria normal. Neurológica con desorientación en tiempo, marcha parkinsoniana y facies hipomímica. Resto normal. Pruebas complementarias. Analítica: Hemograma normal. Cr 1,5mg/dL, Urea 125mg/dL, HbA1c 10,1%, Vitamina B12 420 pg/ml, Treponema negativo.
Enfoque familiar
Antes de ir a vivir con su hermano, María formaba parte de una familia nuclear con parientes próximos en disolución. Actualmente forma parte de una familia nuclear ampliada con parientes próximos al final de la contracción.
Desarrollo
Juicio clínico: Enfermedad de párkinson
Diagnóstico diferencial: Demencia tipo Alzheimer, Demencia vascular, Alteraciones electrolíticas.
Identificación de problemas: inicio súbito de los síntomas, no poder acudir al domicilio por lejanía.
Plan de actuación: derivación a neurología, apoyo familiar, derivación a la trabajadora social.
Tratamiento
Derivación al servicio de neurología, derivación a la trabajadora social, apoyo familiar.
Evolución
A los pocos días de esta visita, María acude con otra cuidadora, una sobrina. Sorprendentemente su aspecto ha mejorado, su capacidad cognitiva vuelve a ser la de antes, no se muestra insegura al caminar. La sobrina nos confiesa que María no ha estado a gusto en casa de su hermano y sospecha de maltrato psicológico e indirecto por abandono hacia la paciente.
El anciano con dependencia y menoscabo de su autonomía es más vulnerable al maltrato que la población general. En este caso, deberíamos haber sido más sensibles a la condición de anciano frágil y pensar dentro del diagnóstico diferencial en la posibilidad del maltrato. En este caso, la entrevista casual a una tercera persona nos ha dado la clave del caso.