Reflexionar sobre la relación que tenemos como profesionales con la industria farmacéutica tanto desde la perspectiva médica, analizando la prescripción y los posibles conflictos de intereses a nivel bioético, como desde una perspectiva ciudadana, explorando las responsabilidades de instituciones como las administración pública o las sociedades científicas.

La actividad se desarrolló en una jornada organizada por la Unidad Docente para residentes de Medicina Familiar y Comunitaria por parte de un tutor y tres residentes de tercer año.

Se empezó explicando que el objetivo fundamental era pensar sobre cómo nos relacionamos con la industria farmacéutica y analizar los posibles conflictos de interés sin juzgar las acciones o ideas personales.

A través de una encuesta anónima se preguntó al público si habían recibido formación sobre dicha relación durante sus estudios universitarios, residencia u otros trabajos, así como si habían recibido obsequios pagados por la industria y si consideraban que esto tenía influencia en su actividad profesional diaria.

Posteriormente, se aportaron datos sobre innovación, evolución del gasto farmacológico en el Sistema Nacional de Salud, pagos a líderes de opinión, desglose de las inversiones de la industria farmacéutica.

Finalizamos la sesión ofreciendo fuentes independientes y críticas donde poder buscar información y sugerencias culturales para fomentar la sensibilización social con el tema.

El público fue muy participativo y valoró positivamente el debate. Asimismo, completó la versión inicial aportando experiencias personales del funcionamiento del sistema sanitario en otros países tales como Ecuador, Cuba, Colombia o Estados Unidos en contraste con nuestro Sistema Nacional de Salud.

Por su pertinencia clínica y social esta actividad es reproducible en otras Unidades Docentes, sesiones clínicas de centros de salud, ponencias en congresos sanitarios o actividades comunitarias en relación con la sociedad civil.