XXXIX Congreso de la semFYC - Málaga
del 9 al 11 de mayo de 2019
Área de urgencias y otra atención especializada.
Caso multidisciplinar
Dolor en hipogastrio de un mes de evolución
Enfoque individual
Antecedentes personales: HTA, anemia con EDA, fibromialgia e hipotiroidismo subclínico. Enfermedad de Graves. Intervenida de apendicectomía.
Anamnesis: Paciente de 59 años con dolor en hipogastrio continúo sin irradiación de un mes de evolución por lo que había consultado en varias ocasiones en urgencias pendiente de eco abdominal y cita en urología. No náuseas ni vómitos. No diarrea. No síndrome miccional. No fiebre.
Exploración: Buen estado general. Cociente, orientada y colaboradora. Normohidratada y normoperfundida. Eupneica en reposo. Tª 36 ºC.
Abdomen: blando, depresible, doloroso a la palpación de forma generalizada más intenso en hipogastrio donde se palpa masa/induración infraumbilical dolorosa. Sin defensa. No megalias. Ruidos normales. Puño percusión renal no dolorosa. Murphy y Blumberg -.
Pruebas complementarias:
- Análisis orina: sangre +++
- Analítica: Hemograma: leucocitos 12880, 74.6%N, Hb 10.6, Hematocrito 34, plaquetas 579.000. Coagulación normal. Bioquímica: glucosa, creatinina, Bilirrubina total, GOT, GPT, amilasa, Na y K normal.
- Ecografía, TAC con contraste abdomen: Conclusión: Sobreinfección de uraco persistente con colección que comunica con pared abdominal.
Enfoque familiar y comunitario
Familia nuclear biparental en etapa III, familia normofuncional.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Juicio clínico: Sobreinfección de uraco persistente.
Diagnóstico diferencial: Infección tracto urinario. Diverticulitis. CRU. EPI. Origen ginecológico.
Identificación de problemas: Necesidad de pruebas diagnósticas para orientar el diagnóstico de la paciente. Dificultad para el seguimiento.
Tratamiento y planes de actuación
Antibioterapia, drenaje percutáneo y extirpación del uraco en un segundo tiempo.
Evolución
Tras drenaje percutáneo se realiza TAC a los 6 meses observándose reducción importante de uraco permaneciendo solo resto a nivel vesical, disminuyendo así mismo su grosor. La paciente sigue revisiones en Urología para valorar posible intervención quirúrgica.
Aunque poco frecuentes en adultos, las anomalías uracales complicadas deben considerarse en el diagnóstico diferencial de dolor abdominal. La tomografía computada es una herramienta útil para su diagnóstico, donde además de la anomalía de base se pueden demostrar sus complicaciones.
Los hallazgos no son específicos para diferenciar entre entidades infecciosas o carcinoma por lo que el estudio histopatológico, como debe ser habitual, es mandatario.
El conocimiento del origen embriológico de los diferentes tipos de remanentes uracales y su representación anatómica son necesarios para orientar un diagnóstico correcto.