Atención Primaria.

Mujer de 55 años que presenta un cuadro de un año de evolución de aumento progresivo del perímetro abdominal que esporádicamente era doloroso.

Enfoque individual

Mujer de 55 años con antecedente de distimia con tratamiento discontinuo con antidepresivos que presenta un cuadro de un año de evolución de aumento progresivo del perímetro abdominal que esporádicamente era doloroso y que a la exploración física expresaba dolor a la palpación en la zona mesogástrica. Dado la normalidad de los enzimas hepáticos y pancreáticos, las determinaciones hormonales, el ionograma y la radiografía simple de abdomen, se remite a la paciente para exploración ginecológica y esta resulta normal. 

Hallazgos ecográficos

Se decide realizar una ecografía: En la ventana epigástrica aparece una imagen más ecodensa que la esperada ecotextura del hígado, de gran tamaño, heterogénea, con septos internos y bordes mal definidos. El médico de familia que realizó la ecografía pensó inicialmente que correspondía al hígado pero seguidamente se sorprendió al encontrar el riñón izquierdo en la línea media abdominal. Se localiza el hígado en la cavidad torácica. El resto de ecografía abdominal es normal.

Pruebas complementarias

Se confirma por TC la existencia de una masa retroperitoneal que no infiltra estructuras vecinas.

Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas

Anatomopatológicamente corresponde a un liposarcoma diferenciado Grado 1 (FNCLCC).

Tratamiento y planes de actuación

Tratamiento quimioterápico neoadyuvante (TRACST cohorte C o D).

Evolución

Incluso con estudios radiológicos sugestivos, el diagnóstico definitivo no se puede hacer sin biopsia/resección. El pronóstico del liposarcoma depende principalmente con los subtipos histológicos, el grado del tumor, la ubicación del tumor y el estado de los márgenes quirúrgicos. Se ha informado que un liposarcoma bien diferenciado tiene una tasa de recurrencia del 50 % sin riesgo de metástasis y una excelente tasa de supervivencia a cinco años.

El liposarcoma es el sarcoma de tejidos blandos más frecuente en todo el mundo. La edad promedio de diagnóstico es de 50 años. La historia clínica y la presentación del liposarcoma se basan en la ubicación del tumor. La localización más frecuente del liposarcoma es en las extremidades, seguida del retroperitoneo y, con menor frecuencia, en el esófago. La presentación clínica y los síntomas no son específicos; por lo tanto, se requiere un alto grado de sospecha para hacer el diagnóstico.