13-14-15 de noviembre de 2025
Servicio de Urgencias.
Mujer de 88 años que consulta por dolor en zona lumbo-sacra tras caída de un metro de altura y traumatismo leve en columna lumbo-sacra.
Enfoque individual
Mujer pluripatológica de 88 años, independiente para todas las actividades básicas de la vida diaria, fibrilación auricular persistente anticoagulada con Warfarina y material protésica en fémur proximal izquierdo, remitida al servicio de urgencias tras caída y traumatismo en columna lumbo-sacra.
A su llegada, neurologicamnete y hemodinámicamente estable con valores de Presión Arterial (PA) 119/58 y frecuencia cardíaca (FC) 100 lpm, con leve dolor en zona lumbo-sacra, sin presentar acortamiento ni rotación de extremidades.
La Rx de columna dorso-lumbar era anodina pero el hemograma mostraba Hb 11,6 g/dl e INR 6,4, sin signos de exteorización.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Durante la observación, los valores de PA descendieron hasta 80/50 sin responder a fluidoterapia, con FC > 100 lpm, además de objetivar un hematoma en hipogastrio izquierdo, por lo que se revirtió la coagulación.
Ante la sospecha de hemorragia intraabdominal o hemorragia retroperitoneal por anticoagulación o traumatismo o fractura pélvica con sangrado masivo, se solicitó Angio-TC abdominal y Rx de fémur.
El Angio-TAC puso de manifiesto un hematoma en recto abdominal izquierdo por foco de sangrado activo en la arteria epigástrica inferior izquierda y/o arteria circunfleja ilíaca profunda. Además, en la Rx se observó fractura de material de osteosíntesis, siendo esto la posible causa de la lesión.
Tratamiento y planes de actuación
Tras la estabilización en urgencias, se realizó arteriografía diagnóstica confirmando puntos de extravasación de contraste, realizando embolización de ambas ramas.
Evolución
Posterior al procedimiento, presentó hipotensión y oliguria precisando fármacos vasoactivos. No hubo anemización ni datos de exteriorización de sangrado ni signos de hipoperfusión periférica. Además, requirió seguimiento por parte de Traumatología, acordándose actitud conservador.
Tras mejoría clínica y analítica, se inició tratamiento con ACOD sin nuevas complicaciones aparentes y ha comenzado a movilizarse precisando apoyo.
En los últimos años se ha evidenciado un importante aumento en el número de casos de sangrado de la arteria epigástrica inferior, cuya incidencia va íntimamente ligada al consumo de fármacos antiagregantes y anticoagulantes. En caso de inestabilidad hemodinámica por perforación arterial, se debe revertir la anticoagulación y realizar tratamiento hemostático urgente.