II Jornadas de Ecografía de la semFYC
marzo 2020
Atención Primaria.
Contusión, cervicobraquialgia y gonalgia postraumática.
Enfoque individual
Varón 37 años acude al Centro de Salud tras sufrir caída accidental de su moto. Refiere cervicalgia irradiada a brazo derecho y gonalgia izquierda.
Exploración clínica: Dolor a la palpación de apófisis espinosas cervicales y musculatura paravertebral cervical. Gonalgia izquierda. No erosión cutánea. Resto sin alteraciones.
Se remite a urgencias hospitalaria para estudio radiológico que descartó lesiones óseas.
Se pautó tratamiento antiinflamatorio y vendaje compresivo. Un mes después presenta mejoría de cervicalgia, pero persiste gonalgia que aún continua hasta la actualidad, a pesar del tratamiento rehabilitador. A la exploración presentaba inflamación subcutánea en cara anterolateral externa de rodilla izquierda.
Hallazgos ecográficos
Realizamos ecografía en el Centro de Salud donde se observan múltiples imágenes hipoecogénicas dentro de tejido celular subcutáneo anterior y compartimiento lateral externo. Resto sin alteraciones significativas.
Pruebas complementarias
Resonancia mágnetica: valorado por el traumatólogo de la mutua de accidentes solicita una resonancia magnética informada como gran edema de tejido celular subcutáneo con colecciones en parte anterior y región lateral externa de la rodilla. No hay derrame articular. Resto normal.
Concordante con los hallazgos ecográficos.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Juicio clínico: síndrome de Morell-Lavallée.
Diagnóstico diferencial: necrosis cutánea, hematomas, bursitis, osteonecrosis y sarcomas de partes blandas.
Tratamiento y planes de actuación
Actualmente tras 8 meses de tratamiento conservador y rehabilitador, persiste sintomatología y una escara cutánea que apareció al cuarto mes.Conclusiones (y aplicabilidad para la Medicina de Familia)
El síndrome Morel-Lavallée es una rara afectación que suele aparecer tras traumatismo directo, más frecuentemente con impacto tangencial, por disrupción de los tejidos blandos a la altura de la fascia muscular causante de desgarro vascular y linfático. Creándose un espacio que acumula líquido seroso, sangre o grasa necrosada. Ocurren con más frecuencia sobre prominencias óseas: sobre el troncánter femoral, columna lumbar, escápula, rodilla y codo.
La sintomatología al inicio es inespecífica y puede tardar meses en aparecer, por lo que es infradiagnosticado.
El diagnóstico es principalmente clínico confirmado con estudios de imagen, entre los que la ecografía es la prueba más coste-efectiva y accesible desde Atención Primaria. El diagnóstico más preciso es con resonancia magnética.
Puede consultar el póster de esta comunicación en la Galería de Pósteres de las II Jornadas de Ecografía de la semFYC.