XXXVI Congreso de la semFYC – A Coruña
del 9 al 11 de junio 2016
Mixto, inicio en Atención Primaria y posteriormente en el Servicio de Urgencias hospitalarias.
Caso multidisciplinar.
Edema facial y cervical.
Enfoque individual
Mujer de 33 años de edad, sin antecedentes de interés, que acude a su Médico de Familia por edema facial localizado de reciente instauración, sin prurito, ni disnea, astenia u otra sintomatología asociada.
Tras exploración física sin hallazgos de interés salvo el edema facial localizado se decide pautar Polaramine y Prednisona a dosis descendente vigilando la evolución.
La paciente acude a los 20 días al Servicio de Urgencias Hospitalarias por persistencia del cuadro con edema extendido hasta parte alta del tórax y miembros superiores. Niega síndrome general ni sudoración nocturna.
A la exploración física presenta edema facial, cervical y torácico. Circulación homolateral en hemitórax derecho. No se palpan adenopatías. Auscultación cardiorrespiratoria normal y abdomen anodino.
Pruebas complementarias con analítica y electrocardiograma dentro de parámetros normales. Radiografía de tórax objetivando una masa hiliar derecha, suprahiliar izquierda, ocupación de espacio paratraqueal, ocupación de mediastino anterior.
TC toraco-abdominal: gran masa hipodensa de 10x10x12 cm en mediastino anterior que condiciona colapso completo de vena cava superior.
Enfoque familiar
Paciente joven sin antecedentes personales ni familiares de interés.
Desarrollo
Linfoma B de célula grande mediastínico, asociado a síndrome de vena cava superior.
Tratamiento
El tratamiento de elección cuando el cuadro es de origen neoplásico, como en nuestro caso anterior, se fundamente en quimioterapia asociando radioterapia.
Evolución
La paciente se encuentra en la actualidad a tratamiento quimioterápico realizando controles por el Servicio de Hematología.
El diagnóstico del síndrome de vena cava superior es clínico. La evaluación inicial del paciente deberá incluir una radiografía de tórax para buscar masas mediastínicas, derrame pleural, colapso lobular o cardiomegalia. En más del 90% de los casos demuestra una alteración. En el 75% de los casos se encuentra una masa en mediastino superior derecho y en un 50% se combina con una lesión pulmonar o una adenopatía hiliar. En un 25% existe derrame pleural, casi siempre del lado derecho.
La tomografía axial computarizada ofrece información diagnóstica más útil y puede definir la anatomía de los ganglios mediastínicos afectados. Es el examen diagnóstico de elección para evaluar la anatomía del mediastino y la estructura de la vena cava superior.