XXXVI Congreso de la semFYC – A Coruña
del 9 al 11 de junio 2016
Servicios de Urgencias.
Caso multidisciplinar.
Paciente de 63 años que presenta temblor de miembros superiores.
Enfoque individual
No RAM. DL en tratamiento con atorvastatina. Hiperuricemia en tratamiento con haloperidol. Síndrome depresivo en tratamiento con paroxetina y seguimiento por psiquiatría. Demencia en estudio por neurología, tratada con carvidopa, levodopa, rivastigmina y haloperidol.
Paciente varón de 63 años que acude a urgencias porque sus familiares refieren que presenta un aumento del temblor en MMSS, está más agresivo y adopta posturas rígidas de miembros y tronco. Explican que está en seguimiento por neurología ya que en los dos últimos meses ha presentado un deterioro cognitivo importante y está pendiente de pruebas complementarias para diagnosticar el cuadro. Además ha acudido en varias ocasiones a urgencias por mismo cuadro, motivo por el cuál está en tratamiento desde hace unas semanas (no recuerda día) con haloperidol. No fiebre. No otra clínica asociada.
Consciente. Constantes: TA 135/85 mmHg y FC 80 lpm. Afebril. Ausculatción cardiopulmonar normal. Abdomen blando y depresible, anodino. Neurológicamente desorientado en las 3 esferas. Distonía y rigidez de las cuatro extremidades y cuello. Discinesias. Sin temblor. Resto de exploración no valorable.
Analítica: CK elevadas. Función renal normal. Iones en rango. Hemograma normal.
Enfoque familiar
Jubilado. Vida activa hasta hace 2 meses. Buen apoyo familiar.
Desarrollo
A la llegada a urgencias el paciente estaba muy agitado motivo por el cual se le administró haloperidol. Posteriormente el cuadro de temblor que presentaba evolucionó a un cuadro de rigidez muscular con imposibilidad de movilizar miembros.
Diagnóstico: síndrome extrapiramidal secundario a haloperidol.
Diagnóstico diferencial: enfermedad de parkinson.
Tratamiento
Biperideno 2mg intravenoso. Hidratación con suero fisiológico 0,9%.
Evolución
Tras tratamiento con biperideno los síntomas de rigidez muscular, distonía y discinesia desaparecieron. El paciente continuaba con desorientación y no recordaba lo sucedido. Se ingresó al paciente para control clínico y analítico. Se retiró el tratamiento con haloperidol.
Este caso nos pone de manifiesto lo importante que es preguntar a los pacientes sobre la medicación que están tomando y si ha habido cambios o nuevos tratamientos, ya que el enfoque diagnóstico puede ser completamente diferente. Concretamente en este caso aprendemos que uno de los efectos secundarios del haloperidol son los síntomas extrapiramidales.