XLIV Congreso de la semFYC - Barcelona
14-16 de noviembre de 2024
Enfoque individual
Paciente de 77 años con antecedentes de hipertensión arterial, dislipemia, estenosis aórtica severa y obesidad que consulta por dolor intenso en región dorsal de ambas manos con importante rigidez matutina de semanas de evolución. A la exploración física, destaca edema con fóvea, mayormente en las articulaciones metacarpofalángicas.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Inicialmente, dada la sospecha de dolor por artrosis, iniciamos tratamiento con AINE. Aun así, el paciente presentaba persistencia de la clínica aun con el tratamiento. Por ese motivo, dada la ausencia de mejora con analgesia y los hallazgos clínicos (edema con fóvea en región dorsal), decidimos ampliar el estudio con un análisis de sangre y radiografía de manos. Analíticamente, observamos elevación de reactantes de fase aguda (PCR y VSG) y factor reumatoide negativo. La radiografía mostraba discretos signos degenerativos articulares compatibles con artrosis.
Tratamiento y planes de actuación
Se orientó el caso como una sospecha de síndrome RS3PE y se inició tratamiento con dexametasona vía oral.
Evolución
El paciente experimentó remisión completa de la clínica confirmándose así nuestra sospecha diagnóstica.
El síndrome RS3PE presenta una incidencia muy baja y es poco conocida por lo que la divulgación es importante porque es fácil de diagnosticar y tratar desde nuestra consulta. El síndrome RS3PE es una artritis seronegativa de afectación simétrica, inicio agudo y con escasos síntomas constitucionales que comparte características clínicas similares a la polimialgia reumática y la artritis reumatoide del anciano, por lo que es muy importante realizar un buen diagnóstico diferencial.
En el caso de nuestro paciente se pudo llegar al diagnóstico gracias a la clínica (edema con fóveasimétrico en ambas manos), los factores analíticos (VSG alterada y FR negativo) y la buena respuesta al tratamiento con corticoides orales.
Es muy importante realizar un correcto diagnóstico diferencial dado el amplio abanico de enfermedades reumáticas. Además, debemos tener en cuenta que puede ir asociado a síndromes paraneoplásicos por lo que deberá descartarse la presencia de neoplasias subyacentes.