XXXIV Congreso de la semFYC - Gran Canaria
del 12 al 14 de junio 2014
Moderador
Francisco Vargas Negrín
Especialista en Medicina Familiar y Comunitaria. Fisioterapeuta. CS Dr. Guigou Centro. Tenerife. Especialista Universitario en Educación para la Salud. Experto universitario en Promoción para la Salud en la Comunidad. Experto profesional en Investigación Aplicada en Ciencias Sociales y de la Salud: Evaluación de Intervenciones. Máster en el Manejo del Paciente Crónico en Atención Primaria. Tutor de la UD Multiprofesional de Atención Familiar y Comunitaria Tenerife Zona Sur. Coordinador del GdT Aparato Locomotor de la SoCaMFyC. Miembro del GdT Enfermedades Reumatológicas de la semFYC.
Francisco Vargas Negrín
Elisa Trujillo Martín
Especialista en Reumatología. Complejo Hospitalario Universitario de Canarias, Tenerife. Doctora en Medicina y Cirugía. Reumatóloga consultora en Atención Primaria en la Zona Norte de Tenerife. Miembro de la Comisión Nacional de la Especialidad de Reumatología.
Resumen
Las terapias biológicas son una importante innovación terapéutica en el tratamiento de muchas enfermedades reumáticas, su uso ha supuesto un cambio en la evolución y pronóstico de las mismas. El médico de familia frecuentemente diagnostica y realiza la derivación al especialista referente (reumatólogo, médico internista, etc.) de enfermos que inician el tratamiento con estas terapias, a la vez que sigue realizando el seguimiento de esos pacientes conjuntamente con esos otros especialistas. Estas terapias presentan dianas terapéuticas nuevas y con mecanismos farmacológicos novedosos. No obstante su uso no está exento de controversias sobre los riesgos-beneficios que para el paciente puede suponer, amen de los costes elevados que conlleva su uso y la indicación más eficiente en función en cada paciente.
El objetivo de esta actualización es que el médico de familia mejore sus conocimientos sobre los diferentes tipos de estas terapias, sus indicaciones, posibles efectos secundarios, precauciones a tener en cuenta y las posibles situaciones relevantes en el seguimiento del paciente, sobre todo aquellas que supongan una posible complicación o fallo en el tratamiento y que requieran una intervención inmediata y activa desde Atención Primaria.
1. Terapias biológicas para enfermedades reumáticas: tipos, mecanismos de acción, indicaciones, contraindicaciones
Dentro del arsenal terapéutico disponible actualmente para el manejo de las enfermedades reumáticas se incluyen las denominadas terapias biológicas. También se llaman bioterapia, terapia modificadora de la respuesta biológica y terapia MRB.
Las terapias biológicas son fármacos que se utilizan para estimular o restaurar la capacidad del sistema inmunitario para hacer frente a enfermedades como el cáncer, patologías autoinmunitarias (artritis reumatoide, psoriasis,…), infecciones, etc. Asimismo, algunas de ellas pueden ser utilizadas para contrarrestar los efectos secundarios producidos por tratamientos para el cáncer u otras enfermedades.
Las terapias biológicas utilizan el sistema inmunitario del organismo ya sea directa o indirectamente reparando, estimulando y mejorando la respuesta inmunitaria. Las ventajas de estos nuevos fármacos son:
Entre sus desventajas están el elevado coste, con un importante consumo de recursos económicos frente a otros tratamientos más convencionales; posibles efectos adversos, y complicaciones derivados de su uso.
Como terapias biológicas se incluyen, fundamentalmente, aquellos recursos terapéuticos que son producidos por organismos vivos (células o bacterias en cultivo in vivo) como citosina (interferones e interleucinas (IL)-2, IL-10, etc.), anticuerpos obtenidos de fuentes humanas (inmunoglobulina humana intravenosa), anticuerpos producidos a gran escala mediante técnicas de ingeniería genética (anticuerpos monoclonales de origen murino, quimérico, humanizados o humanos), proteínas de fusión (etanercept, abatacept, etc.), diversos fragmentos peptídicos acoplados o no a polietilenglicol para prolongar su semivida, así como hormonas (calcitonina, parathormona recombinante, etc.), y la transferencia de células vivas (trasplantes de células madre y de cartílago articular, etc.), genes o vacunas, recursos todos que al ser administrados al paciente producen in vivo sus efectos biológicos.
Tipos de terapias biológicas utilizadas en pacientes con enfermedades reumáticas
Las terapias biológicas aprobadas para su uso en Reumatología de acuerdo con su mecanismo de acción son las siguientes:
El tratamiento de las enfermedades reumáticas y autoinmunitarias ha sufrido un drástico cambio en las dos últimas décadas. El uso de los anticuerpos monoclonales y proteínas recombinantes de fusión dirigidas de forma específica contra moléculas implicadas en la patogénesis de las enfermedades inflamatorias ha producido un cambio real en el tratamiento de estas patologías. Han demostrado que, combinados con la terapéutica tradicional, producen mejoría del proceso inflamatorio y disminución del progreso de la enfermedad. Así mismo, los fármacos biológicos han demostrado una mayor eficacia y una menor reactivación de las enfermedades reumatológicas.
Indicaciones actuales en la prescripción de las terapias biológicas en reumatología
Artritis reumatoide: Anti-TNF (Etanercept, Infliximab, Adalimumab), Anakinra, Abatacept, Rituximab (tras fallo a anti-TNF).
Artritis psoriásica: anti-TNF α (Etanercept, Infliximab, Adalimumab).
Artritis idiopática juvenil: anti-TNF α (Etanercept), Anakinra.
Espondilitis anquilosante: anti-TNF α (Etanercept, Infliximab, Adalimumab).
Osteoporosis: Demosumab.
Lupus eritematoso sistémico: Belimumab, Rituximab.
Otros usos: Sarcoidosis, Vasculitis, Enfermedad de Still, Síndrome de Sjögren…
Contraindicaciones en la prescripción de las terapias biológicas
Son criterios de exclusión antes del inicio de una terapia biológica:
Bibliografía
2. Terapias biológicas para enfermedades reumáticas: complicaciones y efectos secundarios, medidas preventivas y pautas de seguimiento
Terapias biológicas: Los nuevos fármacos en el siglo XXI. Su relevancia en Atención Primaria
Los tratamientos farmacológicos más novedosos en la actualidad son macromoléculas activas que han sido diseñados para que actúen de manera específica sobre una diana terapéutica considerada importante en el proceso patogénico de la enfermedad. Se trata de anticuerpos monoclonales o moléculas de fusión obtenidos mediante cultivos celulares, no por síntesis química. Este tipo de tratamientos se denominan de forma genérica terapias biológicas,están produciendo una revolución en el tratamiento de numerosas enfermedades, y son de interés creciente en todas las especialidades médicas, especialmente la Reumatología. Sus características y su mecanismo de acción las hacen diferentes a los otros medicamentos, y por esta razón su uso debe tener unas consideraciones especiales.
La información referida a cada uno de estos tratamientos suele suministrarse de forma selectiva y exclusiva en los congresos de cada especialidad, sin comunicarse a los médicos de familia. Por ello, resulta muy difícil que los médicos de Atención Primaria puedan estar al día o colaborar en la monitorización de los efectos secundarios de estas terapias biológicas, que pueden ser graves o incluso fatales. Para los médicos de AP es importante conocer la diversidad de tratamientos actualmente existentes y la forma en que deben monitorizarlos.
Complicaciones y efectos adversos
Numerosos ensayos clínicos han demostrado la eficacia y la seguridad de la terapia biológica y, para el seguimiento a largo y medio plazo en la práctica clínica habitual, se han llevado a cabo diferentes registros en muchos países. El más importante en España es el BIOBADASER. Estos registros que incluyen miles de casos indican, en términos generales, un buen perfil de seguridad, pero ponen en evidencia un mayor riesgo de eventos adversos, principalmente infecciosos.
Entre las complicaciones y los eventos adversos relevantes asociados a los tratamientos biológicos destacan:
Gestión del riesgo de las terapias biológicas en pacientes con enfermedades reumáticas. Seguimiento compartido de los tratamientos biológicos: Reumatólogo-médico de familia
Se han elaborado recomendaciones sobre gestión del riesgo de las terapias biológicas en pacientes con enfermedades reumáticas basadas en la mejor evidencia posible. Todo paciente que vaya a iniciar un tratamiento con terapia biológica debe ser sometido a una evaluación previa para estimar y prevenir los posibles riesgos, y debe ser monitorizado de forma regular durante la terapia.
La monitorización del paciente debe ser regular y adaptarse a las características propias de este y de la organización del servicio, siendo recomendable al menos una evaluación al mes y posteriormente cada 1-4 meses, independientemente de quién y cómo las realice. Cualquier vía que facilite la comunicación entre AP y el responsable del tratamiento, incluso del paciente con cualquiera de estos, repercute favorablemente en la seguridad del paciente. El médico de familia debe hacer especial hincapié en la detección de acontecimientos adversos, en especial infecciones, afectación pulmonar, cardíaca, y en casos específicos de alteraciones analíticas (discrasias, función hepática) y preguntar por contactos con pacientes infecciosos (tuberculosis o varicela, entre otros). La consulta o derivación al reumatólogo responsable debe realizarse ante cualquier duda relacionada con la seguridad del fármaco en el paciente (consulta virtual, telefónica, consultor...).
Entre los procedimientos que se deben realizar antes de iniciar el tratamiento, se recomiendan, en general, para todas las opciones de terapia biológica los siguientes:
Durante el seguimiento se recomienda:
Bibliografía: