XXXVII Congreso de la semFYC – Madrid
del 4 al 6 de mayo 2017
Atención Primaria, Neurología, Rehabilitación
Caso multidisciplinar
Presentamos el caso de una niña de 3años que presenta desde hace meses elevación de hombro izquierdo con limitación del cuello para la rotación izquierda y tendencia a la inclinación cefálica.
Enfoque individual
Parto a término; vacunación completa para su edad. Desarrollo neuromotor normal. Episodios de otitis de repetición. Los padres refieren que a raíz de los cuadros infecciosos de otitis comienza con cefalea y cervicalgia. Refieren una elevación progresiva a nivel de hombro izquierdo con impotencia funcional. En la exploración no es posible flexionar el cuello, ni realizar rotación izquierda. Presenta importante elevación del hombro e inclinación cefálica. Orofaringe con rinorrea en pared posterior. Otoscopia y fondo de ojo normales. Resto de exploración sin alteraciones incluida neurológica. Se solicita radiografía de columna cervical cuyo resultado no muestra alteraciones, se pauta analgesia y se deriva a neurología infantil. Neurología confirma la exploración y completa estudio con tomografía cerebral que es normal y resonancia cervical y cerebral que muestra una rectificación de la lordosis cervical con tendencia a la inversión de la curva con vértice en C3-C4. Ocupación de senos maxilares y oído medio. Resto de estudio sin alteraciones.
Enfoque familiar
Buen apoyo familiar.
Desarrollo
Juicio clinico: Tortícolis antialgica secundaria a otitis de repetición
Diagnóstico diferencial: Tortícolis congénitas malformativas, Síndrome de Grises, Osteocondroma cervical, Calcificaciones intervertebrales
Tratamiento
Collarin cervical, calor local, antiinflamatorios e ínterconsulta con rehabilitación
Evolución
Tras realizar ejercicios en domicilio, medidas posturales tortícolis menos llamativa con dolor en la flexión, rotación del cuello y limitación al final de los arcos de movimiento.
La tortícolis es una postura anómala de la cabeza con inclinación hacia un lado y rotación hacia el lado contrario. Cursa con rigidez y puede acompañarse de dolor. Se trata de un signo clínico que aparece en trastornos de diferente gravedad. Para valorar correctamente un niño con tortícolis es preciso hacer una historia clínica cuidadosa y examen físico riguroso, especialmente de cabeza, cuello, ojos, sistema nervioso; en caso de ser persistente es necesario realizar estudios radiológicos.