Mujer de 55 años que consulta por tumoración en zona postero-interna del muslo derecho con crecimiento lento pero progresivo en un periodo aproximado de dos años, ocasionándole, finalmente, dolor intenso y pérdida de movilidad de cadera y rodilla derechas. Anteriormente, fue orientado como lipoma.

A la exploración física pulsos presentes, sin signos de TVP, empastamiento, eritema, ni aumento de la temperatura. Se evidencia bultoma de 15 cm de diámetro y consistencia dura, y varices en ambas extremidades inferiores.

Se realiza ecografía de partes blandas que describe lesión sólida, bien definida, en plano profundo y adyacente al hueso con ecoestructura heterogénea, levemente vascularizada. Avisan por resultado alarmante para descartar una lesión sarcomatosa.

Se solicita resonancia magnética que evidencia una formación ovalada que podría tener origen neurogénico.

Enfoque individual

Antecedentes personales: tabaquismo, hipertensión, dislipemia, obesidad, hiperglucemia, taquicardia sinusal y síndrome ansioso-depresivo.

Enfoque familiar y comunitario

Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas

Cirugía decide alta se deriva al servicio de traumatología, quienes solicitan TAC toracoabdominal sin hallazgos significativos, y biopsia de la lesión que concluye Schwannoma de 13 cm con cambios degenerativos.

Tratamiento y planes de actuación

Se interviene quirúrgicamente, siendo dada de alta con capacidad motora 5/5 y parestesias sensitivas en territorio S1.

Evolución

Presenta buena evolución de la herida quirúrgica y de la capacidad motora pero persisten parestesias, motivo por el cual acude a consulta de Atención Primaria. Se inicia tratamiento con gabapentina con respuesta escasa. Dos meses después, se opta por cambio a pregabalina con buen control clínico y desaparición de las parestesias.

Los schwanommas son el tipo más frecuente de tumor benigno de los nervios periféricos en adultos. Puede presentarse en cualquier parte del cuerpo y a cualquier edad.

Aunque su incidencia es baja y el tratamiento es quirúrgico, el diagnóstico y diagnóstico diferencial suelen realizarse en las consultas de AP, así como los controles posteriores a la cirugía y de las posibles secuelas postoperatorias, dada la mayor accesibilidad, continuidad y longitudinalidad en la atención.