Mujer de 39 años que acudió a la consulta de Atención Primaria para valoración de dolor cervical anterior derecho a principio de Julio que no modificaba con los movimientos, pero exacerbaba con la deglución

Enfoque individual

A la exploración, se visualizaba una leve asimetría y manifestaba dolor selectivo a la palpación en musculatura laterocervical anterior derecha con aumento de volumen con respecto a la contralateral y adenopatías presentes de características normales, sin bocio.

Enfoque familiar y comunitario

No AP ni IQ de interés. 

Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas

A la exploración, se visualizaba una leve asimetría y manifestaba dolor selectivo a la palpación en musculatura laterocervical anterior derecha con aumento de volumen con respecto a la contralateral y adenopatías presentes de características normales, sin bocio.

Tratamiento y planes de actuación

Por ende, se solicitó una ecografía de cuello y analítica sanguínea con hemograma, bioquímica y perfil tiroideo para completar el estudio. La ecografía reveló una glándula tiroidea de ecoestructuras heterogénea secundaria a la presencia de áreas parcheadas hipoecogénicas mal delimitadas que se distribuye de manera difusa por el lóbulo tiroideo derecho y por la región interpolar del istmo tiroideo, estas últimas mal delimitadas, sin cápsula verdadera ni alteraciones vasculares intraglandular mediante Doppler sugiriendo un proceso tiroideo difuso de tipo inflamatorio a valorar tiroiditis subaguda de DeQuervain. El control analítico reveló 3.78 x 10¹²L de hematíes, 10.40 g/Dl de hemoglobina, 31.50% de hematocrito, 63 mm/h de VSG, 10.8 mg/L de PCR, 0.02 uUI/mL de TSH, 2.11 ng/dL de T4 libre, Acs. Anti Tiroperoxidasa < 4 UI/mL y Anti Receptor de TSH negativo.  El manejo farmacológico se hizo con AINES y B-bloqueantes.

Evolución

Tras tratamiento la paciente presenta una mejoría clínica significativa hasta la resolución de la tiroiditis.

En conclusión, la tiroiditis de DeQuervain es importante tenerla presente para iniciar el tratamiento adecuado reduciendo significativamente la duración y la severidad de los síntomas. Además, con un diagnóstico correcto en Atención Primaria se evita la necesidad de consultas hospitalarias y pruebas innecesarias, reduciendo así costos asociados al manejo de la enfermedad, y fortalece la confianza del paciente con su médico de familia.