XXXVII Congreso de la semFYC – Madrid
del 4 al 6 de mayo 2017
Servicio de Urgencias
Caso multidisciplinar
Paciente varón de 82 años que acude a Urgencias por dolor abdominal de meses de evolución, tos y expectoración sin disnea asociada de 1 semana de evolución. No ha presentado dolor torácico, palpitaciones ni fiebre.
Presenta una radiografía de tórax previa de hace 5 días sin alteraciones.
Enfoque individual
Como antecedentes figura HTA, FA anticoagulada con Sintrom, Cardiopatía isquémica, Miocardiopatía dilatada, Gastritis crónica.
El paciente acude por molestias abdominales inespecíficas, y además refiere tos y expectoración blanquecina.
A la exploración presenta buen estado general, sin disnea ni trabajo respiratorio; a la auscultación pulmonar se objetiva MV conservado y ligeros crepitantes difusos.
Se le realiza analítica sanguínea con ligera leucocitosis y aumento de reactantes de fase aguda; y en la radiografía de tórax presenta un infiltrado en lóbulos superiores bilateral.
Enfoque familiar
El paciente realiza una vida independiente, con buen estado general. Sigue sus revisiones por su médico de cabecera y por Cardiología.
Desarrollo
El infiltrado visible en la radiografía se orienta inicialmente como neumónico, pero ante la buena situación clínica y la ausencia de dicho infiltrado 5 días antes se plantea otras posibilidades diagnósticas como un edema agudo pulmonar de causa cardíaca que afecte solo a lóbulos superiores.
Tratamiento
Desde Urgencias se inicia tratamiento antibiótico y a la vez balance negativo con diuréticos. Se decide que ante la evolución clínica se planteará la necesidad de estudios adicionales y la conveniencia de antibioterapia.
Evolución
El paciente se ingresó y se le realizó un TAC pulmonar en el que se aprecia patrón en empedrado compatible con infiltrado infeccioso o edema pulmonar. Se suspendió el antibiótico y se observó con la intensificación del tratamiento diurético remisión del infiltrado en la radiografía. Se realizó Ecocardiograma en el que se observa empeoramiento de la función sistólica.
El paciente presentaba muy buen estado general, que se contradecía con lo observado en las pruebas complementarias, tanto en la analítica como en las pruebas de imagen. Se trata de un caso curioso porque la imagen radiológica del edema pulmonar no suele restringirse a lóbulos superiores y la primera sospecha diagnóstica es que se trate de una neumonia. Una vez más, la clínica orienta el diagnóstico.