XXXVII Congreso de la semFYC – Madrid
del 4 al 6 de mayo 2017
Determinar la utilidad de eventos centinela en la detección de fragilidad.
Muestra poblacional estratificada de personas mayores de 65 años, con capacidad para desplazarse al centro de salud. Se excluyeron personas con expectativa de vida inferior a 6 meses o demencia avanzada. Fragilidad evaluada con adaptación de criterios de Fried. Se consideraron los eventos centinela la presencia de problemas de memoria (con y sin afectación de las actividades diarias), las caídas (diferenciando entre alguna caída y dos o más caídas) y la hospitalización (alguna vez vs dos o más veces) autoinformadas según cuestionario estandarizado. Se consideró lento una velocidad inferior a 0,8 m/s en una distancia de 4 m. Tras ponderar los casos, se calculó la sensibilidad, especifidad y las razones de verosimilitud positiva (RVP) y negativa (RVN) con WinPepi.
Participaron 488 personas, 63% mujeres. Los respectivos valores de sensibilidad, especificidad, RVP y RVN fueron del 95%; 50%; 1,9 y 0,11 para la lentitud; 32%, 93%; 4,15 y 0,73 para tener problemas de memoria; 27%, 95%;5,28 y 0,77 para tener problemas de memoria que afectan la vida diaria; 49%; 77%; 2,10 y 0,67 para haber caído alguna vez; 16%; 94%, 2,69 y 0,89 para haber caído dos o más veces; 33%; 87%; 2,58 y 0,77 para haber sido ho
La lentitud es superior a los eventos centinelas para detectar personas frágiles, aunque su ausencia puede ser útil para descartarla. El incremento en la severidad del evento (repercusión en la vida diaria, repetición de caída u hospitalización) no incrementa la sensibilidad.