XXXIV Congreso de la semFYC - Gran Canaria
del 12 al 14 de junio 2014
ÁMBITO DEL CASO
Atención primaria.
Caso multidisciplina
MOTIVOS DE CONSULTA
Edemas de predominio vespertino, varículas y pigmentación ocre en ambas piernas, con sensación de hormigueo y picor, que mejora en reposo y al elevar las piernas. Refiere que ha empeorado en los últimos meses.
HISTORIA CLÍNICA
Enfoque individual
Paciente de 35 años, sin alergias medicamentosas, ni ninguna enfermedad importante anterior. Acude con signos de insuficiencia venosa crónica en miembros inferiores.
Le informamos de las medidas higiénico dietéticas: cambiar de posición cada cierto tiempo, ni sentado ni en bipedestación durante mucho tiempo, utilizar medias de compresión cuando el clima lo permita, finalizar la higiene diaria con duchas de agua fría en la extremidad distal de los miembros inferiores, y evitar erosiones en zonas de afectación varicosa en la medida de lo posible. Cursamos analítica básica. Prescribimos Fabrovén® (ácido ascórbico 100 mg, hesperidina metocalcona 150 mg, ruscus 150 mg) 2 cápsulas al día.
A la semana nuestro paciente vuelve a la consulta con nuevas lesiones en ambas piernas: máculas eritematosas y pápulas violáceas que no desaparecen a la digitopresión (púrpura palpable), nódulos subcutáneos eritematosos, calientes y dolorosos, rodeados de lívedo reticular, en extremidades inferiores sobretodo en tobillos y pies.
Enfoque familiar
Familia normofuncionante.
Desarrollo
Insuficiencia venosa crónica.
Púrpura palpable.
Tratamiento
Se remite urgente a Dermatología, donde se realiza biopsia con punch para diagnóstico Anatomopatológico. Ante la sospecha de vasculitis se comienza tratamiento con esteroides: prednisona 30 mg (1,5 comprimidos diarios) y se suspende el Fabroven®.
Evolución
A los 3 días, la biopsia cilíndrica incisional, aporta el diagnóstico de vasculitis leucocitoclástica cutánea (por probable reacción farmacológica) dependiente de inmunocomplejos (tipo III). Ante la mejoría clínica se pauta el descenso de corticoides en un mes, a razón de medio comprimido cada diez días.
CONCLUSIONES
Hasta el medicamento aparentemente más inocuo, un flebotónico vendido sin receta puede causar una reacción adversa medicamentosa moderada o grave a pesar de su correcta indicación y utilización. Debemos educar en el consumo del medicamento no sólo indicado, sino estrictamente necesario, no por economía, sino por salud.
En la práctica diaria es preciso la notificación de reacciones adversas a través del sistema de la TARJETA AMARILLA, haciéndonos partícipes del sistema e interaccionando con la información así vertida.