XXXV Congreso de la semFYC - Gijón
del 11 al 13 de junio 2015
Servicios Urgencias
Caso multidisciplinar
Deterioro progresivo y caídas frecuentes.
Enfoque individual
Antecedentes: 95 años. No alergias medicamentosas. No hábitos tóxicos. Hipertensión arterial a tratamiento con indapamida y furosemida. Síndrome ansioso-depresivo a tratamiento con alprazolam. Prótesis de cadera derecha en 2012.
Anamnesis y exploración física: Acude traída por su hijo por presentar cuadro de deterioro general y progresivo de varios meses de evolución con hiporexia, decaimiento y tendencia a la postración, y episodios frecuentes de caídas accidentales en domicilio, el último de los cuales le produce impotencia funcional de cadera derecha. A la exploración física destaca sólo el miembro inferior derecho, que aparece acortado y en rotación externa.
Pruebas complementarias: Ante la sospecha clínica, se realiza radiografía simplede cadera derecha y analítica básica preoperatoria con hemograma, bioquímica y coagulación.
Enfoque familiar
Vive sola. Independiente para las actividades básicas. Buen apoyo familiar por parte de su hijo, quien refiere que pese a su edad, la paciente se niega a recibir ayuda domiciliaria ni a cambiar su residencia habitual.
Desarrollo
La radiografía simple confirma la presencia de fractura periprotésica de cadera derecha. Además, la analítica básica revela hipopotasemia moderada.
Tratamiento
Se decide ingreso hospitalario con tratamiento ortopédico de la fractura de cadera y suplementos de potasio en sueros.
Evolución
La paciente evoluciona favorablemente. Cuando es alta, la paciente se traslada al domicilio de su hijo para recuperación completa y control de alimentación y tratamiento.
La hipopotasemia es un hallazgo frecuente que produce clínica de mialgias, astenia y debilidad muscular, entre otros síntomas. Habitualmente se relaciona con la toma de fármacos que lo favorecen. Es mucho menos habitual por cuestiones carenciales alimentarias, pero dado el envejecimiento progresivo de los cupos de Atención Primaria, y la mejora de la situación basal de muchos pacientes, plantea un origen a tener en cuenta en personas ancianas que vivan solas y sin alimentación supervisada, como fue el caso que se expone, y un diagnóstico a descartar cuando se presentan los primeros síntomas en pacientes con este perfil.