XLIV Congreso de la semFYC - Barcelona
14-16 de noviembre de 2024
Enfoque individual
Hombre de 82 años, sin alergias medicamentosas, exfumador. Independiente para las actividades diarias.
Antecedentes de hipertensión arterial, dislipemia, fibrilación auricular y bloqueo auriculoventricular de tercer grado portador de marcapasos. Tratamiento habitual ramipril 2,5 mg/día, apixaban 2,5 mg/12 h, bisoprolol 5 mg/24 h.
Consulta por mareo y visión borrosa de días de evolución sin poliuria ni polidipsia. En la exploración física presenta hipotensión arterial 70/50 mmHg y exploración neurológica normal.
Se solicita analítica con glicemia 700 mg/dL, hemoglobina glicosilada 17% y osmolalidad plasmática elevada. Se deriva a urgencias hospitalarias donde se da de alta con metformina/dapaglifozina 850/5 mg/12h.
Al día siguiente acude a control en el ambulatorio con empeoramiento clínico. Persiste franca hipotensión arterial 70/50 mmHg y se objetivan signos de deshidratación, a nivel neurológico no presenta focalidad pero sí aumento del mareo y visión borrosa. Analíticamente presenta glicemia 444 mg/dL, osmolalidad elevada en plasma, leve deterioro de función renal y sodio corregido por glucosa de 152 mg/dL, cetonúria negativa.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Con la orientación diagnóstica de síndrome hiperosmótico hiperosmolar como complicación en el debut de diabetes mellitus tipo 2, se administra sueroterapia, 12 unidades de insulina rápida y se deriva de nuevo a urgencias hospitalarias. Allí se mantiene fluidoterapia e insulinoterapia, se reafirma la sospecha diagnóstica y se ingresa en endocrinología para completar el estudio.
Tratamiento y planes de actuación
Durante el ingreso se optimiza el tratamiento, se realiza TAC abdominal que descarta proceso neoformativo y educación diabetológica.
Evolución
Es dado de alta con insulina mixta 50 18-0-10 UI y metformina/dapaglifozina 1000/5 mg/12 horas, con seguimiento posterior en consultas externas de endocrinología y en Atención Primaria con buena evolución clínica.
Creemos importante este caso clínico para remarcar la importancia de detectar las complicaciones potenciales que pueden existir ante un debut de diabetes mellitus tipo 2, siendo una causa frecuente de consulta en Atención Primaria.
El síndrome hiperosmótico hiperosmolar sin tratamiento puede provocar deshidratación severa, shock, convulsiones y coma con elevada tasa de mortalidad. Por ese motivo vemos muy importante su reconocimiento, y ante una glicemia inicial tan elevada como la del presente caso clínico, tener el diagnóstico presente y completar la valoración inicial con analítica de sangre y orina para una correcta detección, manejo y evolución.