XXXVII Congreso de la semFYC – Madrid
del 4 al 6 de mayo 2017
Atención Primaria
Caso multidisciplinar.
Irritabilidad, insomnio y bajo ánimo
Enfoque individual
Antecedentes personales: Alergia a Mitomicina. No DM, no DLP, no HTA. ECV isquémica crónica. Ca basocelular. Ca urotelial de alto grado con RTU.
Enfermedad actual: Varón de 87 años que acude con su nuera, la cual refiere cuadro de insomnio, irritabilidad, somnolencia diurna, tristeza y pérdida de apetito en contexto de cambio de residencia (el paciente prefiere vivir en su pueblo natal) y solicita cambio de medicación de cara al cuadro anímico.
Tras la exploración física, el paciente refiere incapacidad a dormirse en decúbito debido a dolor lancinante en EEII y además relaciona el cuadro anímico con el mismo.
Exploración física: Normal excepto ausencia de pulsos en EEII. MID: Úlcera talonar, úlcera maleolar externa, eritrosis en los 5 dedos. MII: Úlcera talonar y úlcera maleolar externa, eritrosis menor de los dedos respecto a contralateral. Dolor intenso a palpación de úlceras.
Pruebas complementarias: MID: ITB: 0.31 mmHg. MII: ITB: 0.37 mmHg.
Enfoque familiar
Familia en etapa de disolución. Red social con poco apoyo emocional. Viudo desde hace 5 años. Padre de 3 hijos, los cuáles residen en diferentes comunidades autónomas.
Desarrollo
Juicio clínico: Síndrome ansioso depresivo por trastorno adaptativo. Isquemia crítica crónica.
Diagnóstico diferencial: Síndrome ansioso depresivo, trastorno adaptativo, demencias, insuficiencia venosa, isquemia crónica EEII.
Identificación de problemas: Ausencia de comunicación en esfera familiar. Isquemia crítica crónica en EEII.
Tratamiento
Remitido a Servicio de Urgencias para ser valorado por cirugía vascular. Se ajusta analgesia y se inicia Levofloxacino.
Evolución
Pendiente de ser valorado en consultas externas para valorar opciones de revascularización.
La identificación del problema de salud por el que se solicita nuestro servicio es quizás el punto más importante de la entrevista clínica. Y es aquí donde la empatía y la escucha activa del paciente adquieren un papel clave en el proceso diagnóstico.