VII Jornadas semFYC de Medicina Rural
27 y 28 de octubre
Enfoque individual
Mujer 75 años, hipertensión y obesidad. Seguimiento en Salud Mental por síndrome depresivo, actualmente con amitriptilina al acostarse y clonazepam al desayuno. Tratamiento con levetiracetam por epilepsia criptogenética. Probable hidrocefalia a presión normal con alteración de la marcha e incontinencia urinaria, que no mejoró tras punción lumbar evacuadora. Iniciado propranolol por temblor esencial. Durante la pandemia la paciente presenta alteración del comportamiento, deterioro cognitivo progresivo y mayor torpeza motriz. Consultan con neurólogo privado añadiéndose a su tratamiento quetiapina. Por otro lado, toma diariamente omeprazol sin indicación clínica para el mismo. Consultan por mayor desorientación y agitación, con tendencia a fugas y acusaciones de acoso, caídas frecuentes, insomnio (pero hipersomnia diurna). Se realiza una valoración y abordaje en conjunto con Geriatría del hospital comarcal de referencia. Índice de Barthel 40. Índice de Lawton 1. Test de Pfeiffer 7/10. Presenta necesidad de ayuda de tercera persona para transferencias y deambulación, con pasos cortos y mucha dificultad para giros.Enfoque familiar y comunitario
Casada, en una zona rural del occidente asturiano. Trabajos en el campo desde la infancia. Escolaridad 3-4 años. Esposo de 80 años, misma profesión y nivel educativo, sobrepasado con la situación. Reciben asistencia municipal 1 hora al día, y tienen a disposición un centro de día y actividades de ocio.Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Hidrocefalia a presión normal (deterioro cognitivo moderado, alteración de la marcha e incontinencia urinaria). Polifarmacia.
Tratamiento y planes de actuación
Disminución progresiva de clonazepam y amitriptilina hasta su retirada. Retirada de omeprazol. Ajuste de dosis de quetiapina. Inicio de trazodona. Se recomienda centro de día y estímulo para actividades básicas e instrumentales de la vida diaria.Evolución
Desde Atención Primaria se realiza un seguimiento estrecho. Pasados seis meses, la paciente está más alerta, activa, deambulación autónoma con bastón; disminuyen las caídas y hay cierta mejoría cognitiva. Su esposo destaca, positivamente, haber podido retomar las clases de baile impartidas por la asociación vecinal.