Urgencias.

Dolor abdominal. Fiebre.

Enfoque individual

Mujer, 42 años Sin alergias   Diabetes Mellitus tipo 2, 12 años de evolución. Situación sociofuncional: Natural de Venezuela, reside en España desde hace 5 meses. Trabajo esporádico en enero, sin ser alta en la seguridad social.Tratamiento: Metformina 850mg 1-0-1, Insulina Lantus 20 UIEn trámites de regularizar acceso al sistema sanitario, proceso retrasado por la actual situación de pandemia, de momento sin acceso salvo con coste. Hace 20 días terminó la medicación que trajo de Venezuela. Desde hace 5 días síndrome miccional, con dolor en fosa renal derecha desde ayer. Fiebre de 38.5. Náuseas, vómitos, y polidipsiaExploración:38ºC, TA 135/87, FC 97 SatO2 99%, Glucemia (glucómetro) -- ERROR--CyO. Regular estado general. No taquipnea.ACP: rítmica, sin soplos. MVC sin ruidos sobreañadidos. Abdomen blando y depresible, no doloroso. Puñopercusión derecha positiva. Pruebas complementarias:Analítica: leucocitosis con neutrofiila. Urea 27 mg/dl, creatinina 0,84 mg/dl. Glucosa 453 mg/dL, ph 7.40Orina: sedimento con abundantes bacterias y leucocitos. Cetonuria +Ecografía abdominal: sin alteraciones valorables.

Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas

Pielonefritis aguda. Descompensación hiperglucémica simple. Problemas en el acceso al sistema sanitario.

Tratamiento y planes de actuación

Sueroterapia, insulinoterapia, antibioterapia.

Evolución

Ingresa en Medicina Interna para tratamiento y gestión de la problemática social. Buena evolución, alta a las 3 semanas, con cuadro infeccioso resuelto y teniendo acceso al sistema sanitario.

Con este caso pretendo hacer una reflexión sobre las consecuencias que tiene perder la universalidad sobre la salud de nuestros pacientes migrantes. Cuando impedimos que el paciente migrante acceda al sistema sanitario desde la base, desde la atención primaria, contribuimos a generar discapacidad, forzando a atender de manera urgente patologías en estadíos avanzados que podrían haberse prevenido. Es así como leyes redactadas bajo supuestos de ahorro sanitari son un reflejo total de aporofobia.